El césped artificial con tecnología innovadora, destinado a mejorar la calidad del aire y proteger el ambiente, se ha convertido en un hito medioambiental al ser instalado en el CEIP Josefina Aldecoa de Torre de Benagalbón, gracias a la iniciativa de la Concejalía de Sostenibilidad Medioambiental del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria. 

Desarrollado con una avanzada solución nanotecnológica basada en una mezcla de óxidos minerales inorgánicos, este césped artificial actúa como un purificador de aire, imitando la capacidad de los árboles para purificar la atmósfera. Cuando la luz solar incide sobre esta superficie, se desencadena una reacción química que desinfecta la atmósfera, eliminando los contaminantes habituales, lo que representa una importante contribución para contrarrestar la contaminación.

El edil del Área, Borja Ortiz, ha explicado que este sistema, que ya está siendo implementado en otras ciudades europeas, anula una serie de gases contaminantes mediante una reacción química y de temperatura, funcionando de manera similar a un catalizador en los vehículos. Según sus declaraciones, 10 metros cuadrados de este césped artificial tienen la capacidad de eliminar la misma cantidad de NOX (óxidos de nitrógeno) producidos por un coche durante un año al recorrer aproximadamente 12.000 kilómetros.

Francisco Salado, alcalde de Rincón de la Victoria, ha resaltado la importancia de aplicar tecnologías de vanguardia en lugares frecuentados por la población infantil, con el objetivo de mejorar la calidad del aire y proteger el medio ambiente de los efectos nocivos. Salado ha puntualizado la continuación de acciones destinadas a promover la salud de las personas y el entorno en general, ofreciendo así una ciudad más saludable para los habitantes.

Además de su capacidad para purificar el aire, esta tecnología también puede tener un impacto positivo en la lucha contra la sequía, según ha explicado Ortiz. El sistema ha sido descrito como uniforme, de larga durabilidad y con una completa efectividad que se estima en hasta 8 años en espacios exteriores.

La empresa Pureti Europe, responsable de este tratamiento, ha sido reconocida por su innovación, siendo galardonada con el proyecto ESCAPE del programa Horizonte 2020 de la Unión Europea, lo que respalda la efectividad de esta tecnología a nivel internacional.