En medio de la grave sequía que afecta a la provincia de Málaga, específicamente a La Axarquía, el municipio de Rincón de la Victoria enfrenta desafíos considerables debido a la escasez de agua. Esta situación se agrava con la disminución significativa en los niveles del embalse de La Viñuela, el cual se encuentra actualmente en un 7,63% de su capacidad total. Las persistentes condiciones climáticas adversas y la ausencia prolongada de lluvias han llevado a la implementación de cortes nocturnos de agua en Rincón a partir del sábado 25 de noviembre, programados desde las 00:00 hasta las 6:00 horas. 

La decisión, comunicada por Hidralia, la empresa concesionaria del agua en el municipio, se basa en la alarmante discrepancia entre el consumo actual de agua y la limitada oferta hídrica disponible. Rincón de la Victoria se une a una lista creciente de municipios, que han experimentado cortes de agua en los últimos meses debido a la crisis hídrica.

Rincón de la Victoria se une así a otras localidades de la provincia que sufren cortes de agua desde hace meses, como Almogía, Villanueva de la Concepción, Casabermeja, Valle de Abdalajís, Almáchar, Benamargosa, El Borge, Iznate, Moclinejo, Periana, Sedella, Vélez-Málaga o Torrox. Cabe destacar que el pasado 9 de noviembre, Torrox fue el último municipio en sumarse a la implantación de estas medidas restrictivas. En consonancia con esta decisión, el Ayuntamiento anunció la interrupción del suministro de agua en gran parte de su territorio durante la noche del jueves 9 de noviembre, desde las 22:30 hasta las 07:00 horas del viernes 10 de noviembre; unos cortes de agua que se han ido repitiendo desde entonces. El alcalde, Óscar Medina, justificó la necesidad de estas acciones debido al descenso en los caudales provenientes de los recursos hídricos locales, enfatizando la importancia de supervisar los depósitos de agua potable y evaluar posibles medidas a seguir en respuesta a esta situación.

El alcalde de Rincón de la Victoria, Francisco Salado, expresó su preocupación acerca de la situación extrema, destacando que los cortes nocturnos son esenciales para evitar interrupciones más amplias en el suministro durante el día. "Estamos consumiendo más agua de la que recibimos y los cortes son necesarios, obligatorios. Es importante que asumamos que no hay agua", enfatizó Salado.

Desde el mes de junio, el municipio ha tomado diversas medidas para reducir el consumo de agua, como la prohibición del uso de agua potable para riegos, baldeos, llenado de piscinas, corte de suministro en duchas y lavapiés del litoral, cortes en fuentes municipales, y la prohibición de riegos de jardines públicos y privados, así como la limpieza de vehículos. Estas medidas lograron inicialmente un ahorro del 20%, pero la actual situación exige más esfuerzos.

El déficit hídrico se ha agravado debido a la declaración de excepcional sequía en el Sistema Viñuela-Axarquía, que llevó a una reducción del 24,4% en los consumos de agua en comparación con el mismo mes del año anterior, limitando la dotación a 140 litros por habitante día, frente a los 170 litros actuales.

El alcalde instó a los ciudadanos a hacer un uso consciente del agua mediante pequeños gestos cotidianos, como elegir la ducha en lugar del baño, verificar que los grifos estén bien cerrados, corregir posibles goteos y aprovechar los programas de consumo reducido en los electrodomésticos. La falta de recursos hídricos y la escasez de lluvias afectan a toda la comunidad andaluza, subrayando la necesidad urgente de una gestión sostenible del agua en la comarca.

Con respecto a la parte occidental de Málaga, la escasez de agua en los embalses también está generando dificultades similares debido a la sequía. Frente a esta situación, el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha respondido con acciones de importancia crucial. Entre ellas, destaca la aprobación de una medida destinada a mejorar el trasvase de agua entre Málaga y la Costa del Sol Occidental, centrada en la estación de bombeo de Rojas.

Esta iniciativa forma parte del III Decreto de Sequía y tiene como objetivo principal aumentar los recursos hídricos disponibles entre los sistemas Guadalhorce y Limonero. Esta obra beneficiará a ocho municipios, proporcionando agua a una población de 579.350 habitantes, cifra que se incrementa a un millón durante la temporada turística estival.