Comienzan las obras de la segunda fase del Camino del Desfiladero del Tajo
Una pasarela permitirá recorrer la totalidad de la garganta del cortado rondeño y cruzar el Puente Nuevo
El camino del Desfiladero del Tajo de Ronda recibe a sus primeros visitantes: "Es impresionante, es una pasada"
Ronda/Los trabajos de construcción del segundo y último tramo del Camino del Desfiladero del Tajo han comenzado este viernes y se espera que puedan estar completados en un periodo de entre seis y ocho meses, por lo que se espera que este nuevo atractivo turístico de la ciudad pueda estar completado y en servicio para el próximo verano.
Las obras, que tienen un coste de 1.087.426 euros están siendo ejecutados por la empresa Sando que cuenta con la experiencia adquirida durante la reconstrucción del Caminito del Rey para ejecutar este tipo de trabajos en zonas de cortados como la garganta del Tajo por la que discurrirá esta pasarela.
Un proyecto que cuenta con la financiación conjunta de la Diputación de Málaga y el propio Ayuntamiento de Ronda, ya que ambas administraciones apartarán el 50% del coste de este proyecto que se espera que suponga un importante salto para el turismo local que ya está viendo las repercusiones del primer tramo que permite llegar hasta la base del Puente Nuevo.
La alcaldesa de la ciudad, María de la Paz Fernández, ha asegurado que “será un sendero único, que permitirá disfrutar de nuestro principal monumento natural desde una perspectiva nunca antes vista”.
En cuanto a la realización de los trabajos, la empresa utilizará una maquinaria especial para la colocación de unas pasarelas de madera de una anchura de 1,2 metros que se instalarán a tres metros del fondo del cauce del río, para salvar su crecimiento en caso de lluvias torrenciales. "Todos los elementos que se coloquen en este tramo, en caso de que tuvieran que ser retirados, no generarán ningún impacto al entorno”, ha recordado la regidora.
De esta manera, los trabajos arrancan en la base del Puente Nuevo y transcurrirá hacia la barriada Padre Jesús, desembocando en la zona de los baños árabes, concretamente junto a la ermita de San Miguel. Se trata de un recorrido de 500 metros de longitud, a los que se suman los 200 que están abiertos al público desde el pasado mes de abril y que han registrado más de 75.000 visitantes de todo el mundo.
Fernández ha querido agradecer públicamente “la colaboración constante y permanente de la Diputación Provincial en un proyecto como este, que estamos seguros que supondrá un atractivo de interés para toda Málaga y Andalucía, como prueban las numerosas visitas que hemos registrado en la primera fase, desde su apertura el pasado mes de abril".
Por su parte, el presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, que ha asistido al inicio oficial de los trabajos, ha recordado que la institución participó económicamente tanto en la primera fase del proyecto como en esta que ahora arranca y “para nosotros es esencial que un Ayuntamiento como el de Ronda planifique actuaciones como esta, que al final fortalecen la marca Málaga con atractivos propios que van más allá del tradicional sol y playa y que hacen que los visitantes quieran conocernos por nuestros encantos naturales”.
Al respecto, la regidora local ha recordado que, durante el transcurso de las obras, la primera fase permanecerá abierta al público “salvo cuestiones muy puntuales por necesidades específicas de la actuación”.
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