La lluvia impide la salida del Resucitado en Ronda

La hermandad realizó un acto en el interior de la Iglesia del Espíritu Santo

Una fe resucitada bajo los paraguas

El Resucitado se quedó en el interior de la iglesia del Espíritu Santo.
El Resucitado se quedó en el interior de la iglesia del Espíritu Santo. / Javier Flores

La Semana Santa de Ronda terminó sin que su última hermandad pudiese salir a la calle y realizar el recorrido previsto debido a la lluvia. El Resucitado tuvo que quedarse en el interior de la iglesia de Santa Cecilia y realiza un acto interior.

El hermano mayor de la cofradía, Miguel Lorca, ha pedido a los hermanos que no se sientan tristes por la decisión y ha recordado que "lo importante es que el Señor ha resucitado, tenemos que estar alegres por ello". A pesar de todo, en el interior del templo se derramaron lágrimas ante la imposibilidad de realizar su salida.

La hermandad del Santo Entierro, que es la encargada de procesionar el Resucitado, y que la única con dos salidas procesionales, cuenta con la peculiaridad de que el Domingo de Resurrección sus imágenes son portadas por costaleros mientras el Viernes Santo lo hacen horquilleros. Además, el paso de la Virgen del Loreto que acompaña al Resucitado cuenta con una cuadrilla de costaleras. Única en la Semana Santa de la ciudad del Tajo.

Algunas costaleras no pudieron reprimir las lágrimas
Algunas costaleras no pudieron reprimir las lágrimas / Javier Flores

Tras anunciar la decisión de no salir, ambos pasos han sido llevados hasta las puertas de la iglesia para que las personas que se habían concentrado a sus puertas bajo la lluvia pudiesen verlos. Todo lo ello ha estado acompañado por las diferentes marchas que han interpretado las bandas de música que se han situado en el interior del templo.

Una vez finalizado el acto se daba por concluida una Semana Santa en la que este año, pese a las previsiones meteorológicas poco favorables, tan solo han sido suspendidas dos salidas. Hasta este domingo tanto solo la hermandad del Silencio no había podido realizar su estación de penitencia debido a la lluvia y el viento.

De este modo se ha completado una semana en la que también han sido miles de personas las que se han concentrado en las calles de la ciudad para ver los diferentes desfiles procesionales, y es que, más allá del sentir religioso, estas fechas también representan un momento muy importante para una ciudad que tiene en el turismo uno de sus principales recursos económicos.

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