Reto solidario en los 101 de Ronda: un ex legionario con un 92% de discapacidad tomará la salida

Málaga/Este fin de semana se celebra entre las sierras de Ronda y Cádiz una de las pruebas más duras y populares del calendario de carreras de montaña y ultrafondo: los 101 Kilómetros de la Legión, en Ronda. Una prueba icónica que muchos sueñan con correr (y acabar), como es el caso de este "esteponero de pro" aunque nacido en Madrid. Alejandro Navarro, de 47 años, cumplirá por fin este anhelo, aunque en unas circunstancias particulares. Y es que quien fuera legionario, paracaidista y policía nacional, sufre desde hace años una discapacidad del 92% que hace que la organización de la prueba le haya concedido un permiso especial para participar en la prueba, lo que le convertirá en la primera persona en estas circunstancias en tomar la salida este sábado por la mañana en la prueba por equipos.

“Después de participar en la organización de la carrera, como legionario, durante años, cuando era policía empecé a prepararme físicamente para el reto, fue entonces cuando sufrí el accidente que me dejaría tetrapléjico. Durante mucho tiempo pensé que ese sueño quedaría enterrado. Pero aquí estamos, y no llego solo, llegamos muchos”, afirma Alejandro, quien desde su accidente, el 5 de diciembre de 2013, y apoyado por su mujer Nadia fundó hace años su propia asociación sin ánimo de lucro, Asociación Alejandro Navarro, desde donde organiza eventos deportivos con fines sociales, imparte conferencias motivacionales y promueve retos de superación considerados “imposibles” para una persona en su situación bajo el lema Dar sin recibir nada a cambio. Y es precisamente esta vocación solidaria la que le ha llevado a participar en la 101 con un objetivo solidario: recaudar fondos para la Asociación AOPA Autismo Ronda, que atiende a más de 170 niños y jóvenes con autismo, y da apoyo a cerca de 500 familiares. “Quería que este esfuerzo tuviera sentido más allá de lo personal. AOPA hace una labor inmensa en Ronda y necesita más recursos para seguir creciendo. Si mi reto sirve para dar visibilidad y apoyo económico a su causa, todo habrá valido la pena”, afirma Alejandro, quien cuenta que su asociación colabora con muchos niños con autismo de Estepona.

Alejandro no correrá solo

Un accidente doméstico hace doce años le provocó una fractura cervical a la altura de la vértebra C5, dejándole tetrapléjico y solo con movilidad parcial en bíceps y hombros, carece de equilibrio en el tronco, sufre espasmos musculares y no tiene termorregulación, lo que le impide sudar. Por todo ello, Alejandro contará con un equipo de cuatro personas que lo acompañarán en todo momento, que junto a él forman el equipo oficial de cinco personas, tal y como exige la normativa de la prueba. Además, otros dos corredores han decidido sumarse voluntariamente al proyecto para colaborar en su asistencia y en el esfuerzo compartido. Cuatro de ellos han sido también legionarios y otros dos con experiencia en pruebas de ultrafondo. Otro de los integrantes es un doctor del Hospital Nacional de Parapléjicos, lo que garantiza una supervisión médica constante durante toda la prueba. Además del equipo en carrera, Alejandro estará respaldado por un dispositivo externo de apoyo compuesto por dos vehículos: uno con sus familiares —entre ellos, otra doctora del Hospital Nacional de Parapléjicos— y otro perteneciente al cuerpo de bomberos, con cuatro efectivos que se mantendrán disponibles para cualquier incidencia.

En las horas previas a su participación en la 101, Navarro recalca que "mi objetivo en la carrera es el mismo con el que afronto cada reto. No me gusta la palabra discapacidad. Hay que reivindicar a las personas con lesión medular, que también estamos ahí. Yo me lo trabajo, tengo mucha fuerza de voluntad pero hay otros que no tienen ni la fuerza ni el apoyo necesarios". Va por ellos.