Como si no nos hubiera pasado una pandemia por encima, con la enfermedad, la muerte y los miedos aparcados en un rincón, este Domingo de Ramos nacía con la ilusión de aquel lejano 2019 en los alrededores de San Felipe Neri y calle Parras. Todos caminando en la misma dirección, salvo algunos guiris que buscaban su dosis matutina de café en sentido contrario, lo pasos se acercaban el epicentro, que no era otro que la casa hermandad de La Pollinica. 

En un día de cielos despejados que anunciaba una jornada pletórica para las nueve cofradías dispuestas a realizar sus salidas, con ropas de estreno y la sonrisa bien pintada desde primera hora, era momento para el encuentro. Un grupo de amigos, cuyos pequeños nazarenos acompañarían a la Virgen del Amparo, esperaban en la calle Dos Aceras. Frente a las puertas de La Sangre verían desfilar el cortejo de nazarenos, que salía desde la iglesia. 

Calle arriba, los fieles se multiplicaban exponencialmente y se apostaban en los laterales de la vía para no perderse el momento más esperado, la salida de Nuestro Padre Jesús a su entrada en Jerusalén y la Virgen del Amparo. Tras las  grandes puertas, después del rezo de los hermanos, sonaron las primeras campanas de la Semana Santa de 2022, brindadas a los sanitarios, afectados y fallecidos por causa del Covid-19.

"¡Viva el Señor de la Pollinica, viva la Virgen del Amparo, viva el Domingo de Ramos!". Pasados unos minutos de las 10:15, su hora prevista, el trono del Señor sobre los hombros de 180 portadores comenzó su recorrido hacia la calle Dos Aceras para seguir por la plaza del Teatro, Comedias y Santa Lucía, ya que este año la cofradía no ha pasado por Carretería. 

La banda de cornetas y tambores de la hermandad del Nazareno de Almogía abría el cortejo y tras el Señor, la agrupación musical Clemencia de Jerez acompañaba por primera vez a los Sagrados Titulares. Tras ellos se abrió la sección de María Santísima del Amparo. Su trono estaba precedido por unos 280 nazarenos.

Con los acordes de la banda municipal de música de Lora del Río y los aplausos de los congregados, la Virgen dio sus primeros pasos por la calle Parras. Y ha sido, además, la primera vez que procesionaba María Santísima del Amparo tras la restauración de Antonio Bernal. 

Su manto verde oliva frente a la torre de San Felipe Neri, aunque manchada por la calima, provocaron una estampa emocionante. Después de lo vivido desde el confinamiento de 2020, parecía un sueño cumplido ver de nuevo el palio bordado en oro desfilar hacia el recorrido oficial. 

María Santísima del Amparo acompañada por sus nazarenos.

Con La Pollinica en la calle, tocaba seguirla en su recorrido hasta su entrada en Tribuna, prevista a las 12:15. Luego recorrería la calle Larios en sentido sur hasta las calles Martínez, Atarazanas, Alameda, Molina Larios y torre sur de la Catedral. Con esta primera cofradía se revalidaba el trazado inaugurado por la Agrupación de Cofradías hace tres años. A las 16:15 tiene fijado su encierro, de nuevo en su casa hermandad. 

La próxima en salir será Dulce Nombre, en su tinglado de Capuchinos. Si el tiempo lo permite, y las lluvias previstas para el lunes y el martes no alteran los planes, otras 44 salidas más se esperan en la capital malagueña hasta el Domingo de Resurrección.