13 de abril de 2017, Jueves Santo, se cumplían los 75 años de los desembarcos de la Legión en el puerto de Málaga. Contabilizando el primero sucedido en 1930 y los que se retomaron a partir de 1943 de una forma continuada, este acto se ha convertido en uno de los más destacados en la Semana de Pasión malagueña; un día de referencia donde se mezclan lo castrense, el fervor popular, lo religioso y, por qué no decirlo, la vida portuaria. Con el recuerdo de aquella soleada mañana primaveral y, sin olvidar al buque de la Armada española Contramaestre Casado que en aquel 2017 cumplimentaba su decimonoveno traslado legionario, en esta ocasión, quiero reseñarles unos muy significativos hechos acaecidos en el puerto malacitano durante los días que duró aquella Semana Santa.

Teniendo en cuenta que estos siete días tan especiales para Málaga nunca han despertado demasiado interés para las navieras que gestionan los tráficos cruceristas, les diré que entre las jornadas del 9 y el 16 de abril de 2017, trece buques de turistas estuvieron presentes en las aguas del puerto malagueño cumplimentando un total de 14 escalas . Realizando itinerarios atlánticos y mediterráneos y, manteniendo unos horarios de salida poco compatibles con el callejeo cofrade, estos buques que atracaron en las instalaciones cruceristas de levante salvo uno que usó el muelle número dos, participaron de la singular circunstancia de estar presentes en todos y cada uno de los días en los que hubo procesiones; una curiosidad que hizo que el Sábado Santo, sin cortejos religiosos, no escalara en Málaga ningún barco de turistas.

Frente a estas estadísticas que se saldaron con la presencia de tres buques el Domingo de Ramos, uno el lunes y otro el martes, tres el miércoles, dos el jueves, uno el viernes y tres el Domingo de Resurrección, les diré que la Semana Santa de 2017 constituye hasta la fecha la que mayor afluencia de buques de crucero ha tenido en el puerto malagueño.

Y si bien este dato ya resulta suficientemente significativo, aún lo es más si recordamos que en el transcurso de aquellos siete días de la Semana de Pasión malacitana, cuatro diferentes buques de crucero realizaron labores de repostaje en las horas que duraron sus respectivas escalas; unos abastecimientos realizados por dos buques cisterna.

Partiendo de la premisa de que los repostajes barco a barco siempre han sido muy controvertidos, en el año 2010, el puerto de Málaga se estrenaba en esta modalidad de recarga de combustible; una opción que, en un principio, debería haber supuesto un valor añadido a las aguas malacitanas. Ejecutadas en aquel año cuatro operativas de estas características sobre barcos de turistas, la opción real de este tipo de abastecimiento quedó paralizada hasta 2017, momento en el que se retomaron estas maniobras. Iniciadas en el mes de abril, los siete días en los que se celebró aquella Semana Santa constituyen unas jornadas de récord que aún no han sido superadas.

Particularizando sobre aquellas operativas, les reseñaré que aquel Lunes Santo, el buque de la compañía Holland America Line Westerdam, atracado en el muelle norte de la estación marítima de levante recibió 701 toneladas de fuel del buque cisterna Patagonia 100. Dos días más tarde, y ya estaríamos en el Miércoles Santo, el Koningsdam también de Holland America Line, amarrado en el muelle sur de levante mostrando sus impresionantes 297 metros recibía combustible del mismo barco que había abastecido horas antes a su hermano de naviera.

Situados ya en el Jueves Santo y, cuando los legionarios del Tercio Juan de Austria III de Almería, recién desembarcados se encontraban en la Plaza Fray Alonso de Santo Tomás, el buque de Costa Magica iniciaba su maniobra de repostaje atracado en el muelle norte de levante.

Completadas aquellas tres operativas realizadas por el Patagonia 100, el Domingo de Ramos, el ya desguazado Horizon de la desaparecida compañía Pullmantur, amarrado en el muelle sur de levante recibía combustible del buque cisterna Hercules 100 mientras El Resucitado y La Reina de los Cielos procesionaban por las calles de Málaga.

Con el añadido de que el mencionado Horizon que cerró los repostajes cruceristas en aquella Semana Santa es el buque de turistas que más veces se ha abastecido de combustible en maniobras barco a barco en las aguas malacitanas hasta la fecha, aquellos siete días de 2017 ya forman parte de la historia; una Semana de Pasión que además de brillar en las calles también lo hizo en el puerto de Málaga.