Los cabildos en las cofradías no cesan en un verano que se presenta más activo de lo habitual. La cofradía de los Estudiantes decidió aprobar por unanimidad la restauración del Santo Cristo Coronado de Espinas por parte del imaginero Juan Manuel Miñarro. El restaurador realizó un diagnóstico de la sagrada imagen y elaboró una propuesta de intervención integral de la misma.

Los trabajos tendrán una duración estimada de cinco meses, y se espera que el sagrado titular pueda estar de vuelta para finales de febrero, de cara al triduo que se celebra anualmente en su honor durante los primeros días de Cuaresma.

Además, los hermanos también aceptaron la invitación de la Agrupación de Cofradías para que el Santo Cristo Coronado de Espinas participase en el Vía Crucis extraordinario por el centenario de la institución cofrade, que se celebrará el primer viernes de la Cuaresma del 2022.

Con respecto a la titular mariana, Nuestra Señora de Gracia y Esperanza, se aprobó de forma unánime la propuesta de intervención sobre la policromía a cargo del artista malagueño Francisco Naranjo Beltrán. Estos trabajos, que están previstos que duren unos dos meses y medio, pretenden devolver a la Virgen su aspecto original. La Virgen de Gracia y Esperanza podrá presidir el triduo en su honor a mediados del mes de diciembre con un aspecto remozado.

Por todo esto, los dos sagrados titulares de la cofradía de los Estudiantes se retirarán del culto una vez que se reciban las autorizaciones pertinentes por parte de la Diócesis de Málaga y la delegación de Cultura de la Junta de Andalucía.

La corporación del Lunes Santo continúa adelante con sus proyectos, sin descuidar su labor caritativa que se ha incrementado sensiblemente en todo este tiempo. Una prueba de ello es el donativo entregado a la Casa del Sagrado Corazón ‘Cottolengo’, junto a la Fundación la Caixa, de 12.000 euros el pasado viernes 25 de junio. Porque las hermandades malagueñas siguen teniendo muy presentes a los más necesitados.