Semana Santa

Un submarino con alas de paloma

El soldado creyó en Dios

¿Tiene justificación desde el Evangelio que algunos cristianos quieran abolir directamente los ejércitos? Antonio Moreno (revista Diócesis) hizo esta pregunta a monseñor Juan del Río, arzobispo castrense de España. Y esta fue la respuesta: "Fue un soldado romano el primero que hizo una profesión de fe en el Dios crucificado: "verdaderamente este era el Hijo de Dios". Y también recuerda que "Jesús curó al criado del centurión romano". Por lo demás, la entrevista se ilustra con una fotografía del traslado del Cristo de la Buena Muerte. Muy oportuna en este día en que Mena toca el corazón de creyentes y no creyentes.

Lo que cuesta una cuesta

El pasado año por estas fechas teníamos ya a la Hermandad de la Sagrada Cena en su correspondiente jornada, adaptada a su parroquia y tratando de no estrellarse en el multitudinario y complicado tráfico del Jueves Santo. La lluvia le impidió comprobar si las medidas adoptadas eran las buenas y asumir un reto que había despertado una gran expectación: la subida de la calle Casapalma del tirón desde la plaza de Uncibay en 13 minutos y con una marcha especial. Me he acordado de la primera subida del Prendimiento por la calle Carrión con curva incluida y de cómo corría la gente para no perdérselo.

Espina del Jueves Santo

La exposición celebrada en la Alameda y que se hayan quitado los andamios de la ermita son dos buenas noticias que nos llegan de Zamarrilla, además de la restauración que ha hecho Manuel Mendoza del Mater Amargura y del estreno de la marcha Rosa del Jueves Santo de José A. Molero. Pero, por desgracia, esta cofradía lleva seis años y algunos meses intervenida por el Obispado y las elecciones que iban a celebrarse han quedado en el aire al bloquearse la adaptación de sus estatutos. En cualquier caso, que se hablara de tres candidatos refleja el fracaso del método gestora para aunar voluntades.

La casa de la Misericordia

Los tronos de la Misericordia saldrán este año de la casa de hermandad, inaugurada recientemente. Llevaban diez años solicitando una parcela para poder construir y ahorrarse, entre otras cosas, 1.200 euros al mes en alquileres. La Asociación de Veteranos del Ejército del Aire, Gurripatos de Málaga, recuerda la tradicional vinculación del Ejército del Aire y la de sus veteranos con la cofradía. Ahí tenemos a la Escuadra de Gastadores, Sección de Honores, de la Base Aérea de Málaga y a la Banda de Música de la Base Aérea de Tablada. Sin olvidar la presencia que, de forma voluntaria y gratuita, siguen teniendo los soldados actuales del Ejército del Aire (mayoritariamente malagueños), participando para mayor honor y gloria de la Semana Santa. En tiempos de Jesucristo no se había desarrollado el Ejército del Aire, pero sus soldados hubieran sido tan creyentes como el centurión romano.

La llave abrió la puerta

Este año también he vuelto a recordar con gran emoción las primeras impresiones de un familiar mío, no residente en Málaga, cuando vio desfilar por primera vez a la Hermandad Sacramental de Viñeros. Mucho me dolió verla en las páginas de sucesos: el accidente del trono, el problema con los seguros y el berrinche con el restaurador. La llave del sagrario ha abierto la puerta a una etapa de sosiego y ya lo tenemos finalizado por Gonzalo Merencio y dorado por Manolo y Antonio Doradores.

Todos somos esperancistas

Quien piense que está todo dicho sobre la Archicofradía del Paso y la Esperanza se equivoca. Las divergencias son directamente proporcionales a su gran tamaño. Pongo un ejemplo: por 76 votos de diferencia los hermanos aprueban el proyecto de retablo para la basílica cuyos trabajos durarán entre diez y doce años. Democráticamente es correcto el acuerdo, aunque solo con 192 votos a favor. Esos son, al parecer, los únicos malagueños que tienen las ideas claras. El resto de hermanos -que son muchos más- no saben, no contestan o saben demasiado. A este debate nos unimos los demás cofrades. Si la mancha de la mora con mora sale, ya veremos si a esta decisión le cabe marcha atrás, democráticamente también.

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