Un estudiante de FP gallego llevó a la Consejería de Educación a los tribunales, culpando a un profesor de haberle hecho perder un curso y una beca tras haberle suspendido, y reclamaba una indemnización de 100.000 euros por daños y perjuicios, pero el tiro le ha salido por la culata. La Justicia ha rechazado su caso y le ha impuesto además el pago de 1.500 euros de las costas procesales.
El caso, según ha publicado este miércoles La Voz de Galicia, se remonta a 2018, cuando el alumno, que cursaba Automoción en el CIFP Valentín Andrade de Vigo, echó la culpa al docente tras haber suspendido una asignatura que, según el estudiante, le hizo perder el curso y una beca.
En el examen sacó tres puntos, pero no estaba conforme con la nota, por lo que presentó diversas reclamaciones en la administración educativa hasta que la inspección revocó el suspenso y lo aprobó con un cinco debido a un defecto de forma.
Como continuación del proceso, en mayo de 2019, presentó una reclamación por responsabilidad patrimonial contra la Consejería de Educación, en la que denunciaba una supuesta "actuación arbitraria" del profesor y reclamaba una indemnización de 100.000 euros por los daños y perjuicios, entre ellos 2.183 por la pérdida de la beca, otros 40.000 euros por el "sufrimiento psicológico" y casi 58.000 euros más porque había tenido que realizar el ciclo en tres años en lugar de dos,
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