Sanidad

Vinculan el consumo de zinc con una disminución del deterioro en mayores

Una mujer mayor acompañada.

Una mujer mayor acompañada. / R. D.

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el CIBER de Epidemiología y Salud Pública (Ciberesp) revela que el consumo de zinc a través de la dieta se asocia con un menor riesgo de deterioro de la función física y síndrome de fragilidad en personas mayores.

El estudio, que se ha realizado sobre 2.963 adultos mayores de 65 años en España, apunta que la ingesta “adecuada y suficiente” de zinc a través de una dieta saludable podría prevenir el deterioro físico y la progresión a fragilidad, contribuyendo a un envejecimiento saludable, según resume la UAM en una nota.

Publicación científica

En concreto, los resultados, que se han publicado en la revista Journals of Gerontology: Series A Medical Science, muestran que un consumo mayor de zinc a través de la dieta habitual estaba asociado a menor riesgo de deterioro de la función física y de fragilidad incidentes después de nueve años de seguimiento.

En cuanto a los posibles mecanismos implicados en esta asociación, destaca la intervención del zinc en la modulación de vías de señalización de producción de citoquinas inflamatorias por la proteína A-20 y la regulación de proteínas de unión al zinc, como el factor NRF2 o metalotioneína.

Los autores principales del trabajo ponen en valor que los beneficios del zinc se pueden obtener de forma accesible a través de una dieta saludable que incluya alimentos ricos en este nutriente, como carnes, cereales, leche y productos lácteos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios