Los cuatro chicos que asaltaron a un turista canadiense de 25 años el pasado 15 de marzo y que provocaron que se cayera y muriera fueron localizados y se encuentran actualmente en prisión preventiva mientras avanza la investigación. 

La víctima se encontraba junto a sus amigos en Barcelona para ver el partido de fútbol entre el Real Madrid y el Barcelona FC. Cuando finalizó el encuentro se marcharon a cenar a una zona de ocio de la capital donde fueron asaltados por cuatro chicos.

En la huida, el grupo de amigos extranjeros se dividió y el chico de 25 años se quedó solo. Intentando protegerse de los ladrones saltó desde un puente creyendo que no había altura suficiente al otro lado.

Los ladrones no solo le quitaron su teléfono móvil sino que además lo siguieron persiguiendo y cuando se precipitó no lo socorrieron, dejándolo morir en el lugar al que cayó.

A pesar de que un camionero y una pareja de taxistas trataron de reanimarlo no pudieron hacer nada por salvarle la vida. Fueron sus dos amigos quienes explicaron a los Mossos lo que había sucedido y, como consecuencia, se abrió una investigación para dar con los asaltantes y esclarecer los hechos. 

La investigación

El hecho de que después de extraerle el móvil al chico siguieran persiguiéndolo, aun a pesar del trágico desenlace, vendieran el dispositivo a una tienda de telefonía móvil hizo pensar a los investigadores que no era la primera vez que actuaban.

La investigación la llevó a cabo la Unitat de Investigació del distrito de Sant Martí de los Mossos d'Esquadra y para ello ha sido fundamental el análisis de las cámaras de vídeo de establecimientos cercanos así como la información aportada por los testigos, especialmente los amigos del fallecido. 

Los Mossos pudieron localizar, además, un coche cercano en el que quizá se habían desplazado los agresores y uniendo toda la información con la que contaban consiguieron dar con los autores del homicidio. 

La tienda de telefonía

De forma paralela a esta investigación, la Unitat de Investigació de la comisaría de Martorell llevó a cabo días después una operación contra un negocio de telefonía móvil de Abrera, en el Baix Llobregat. Recababan información sobre un hombre al que perseguían, también, por un robo violento y del que, además, sospechaban que vendía dispositivos sustraídos en su establecimiento. 

El hombre fue arrestado y la tienda, registrada. Entre los teléfonos inspeccionados, los agentes dieron con el móvil del turista fallecido en la Ronda Litoral. Los cuatro ladrones se lo robaron antes de que se precipitara y lo vendieron.

Los Mossos consideran a este sospechosos autor de un delito de receptación, lo que quiere decir que adquiere artículos robados para venderlos, aun sabiendo que han sido robados.  

Prisión provisional

Los cuatro asaltantes pasaron el pasado jueves, 11 de mayo, a disposición de la magistrada del Juzgado número 18 de Barcelona, que tras escucharlos y leer los informes policiales, decretó su ingreso provisional en el centro penitenciario de Quatre Camins. A los cuatro se les acusa de los delitos de homicidio doloso y robo con violencia e intimidación con armas peligrosas y abuso de superioridad. 

En un principio se trató de esclarecer si el chico cayó desde el puente pensando que no había demasiada altura o si fueron los propios agresores quienes lo empujaron.

A raíz de la investigación la jueza ha considerado que los sospechosos no lo empujaron deliberadamente aunque sí sospecha que eran conscientes del peligro de muerte al que estaban sometiendo al turista, y no les importó.