La presidenta del Consejo de Administración de Radiotelevisión Valenciana (RTVV), Rosa Vidal, y todo el equipo directivo de la sociedad han presentado su dimisión tras el anuncio de cierre de la televisión pública. La dimisión es efectiva con fecha de este miércoles y atiende a una "falta de confianza" por parte de la dirección de RTVV en el Consell tras el anuncio de cierre de la empresa y "tras haber faltado a la verdad" en una nota de prensa posterior, según han informado en un comunicado.

En ese comunicado del Gobierno valenciano se señalaba como una de las causas fundamentales para la nulidad del ERE "la desafección de 186 trabajadores", en su mayoría técnicos, decidida por la propia Rosa Vidal para evitar que cesaran las emisiones de Televisión Valenciana. La propia Vidal ya dijo que lo que afirmaba el comunicado de la Generalitat "no se ajusta a las causas que recoge la sentencia para dictaminar la nulidad del ERE" y anunció su intención de no participar en el cierre de la empresa pública.

Este miércoles, en una comparecencia en el Palau de la Generalitat ante los medios de comunicación para explicar la decisión de cerrar RTVV, Fabra ha confirmado que la directora general no iba a seguir en sus funciones y la ha responsabilizado de parte de las decisiones adoptadas en aplicación de un ERE de cuyo resultado también ha responsabilizado a los sindicatos.

Los trabajadores toman las riendas de la programación

Los trabajadores de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) han tomado desde las riendas de la programación tanto de la televisión como de la radio autonómica para reivindicar su supervivencia y defender que no se cierre un medio de comunicación con 24 años de existencia. Los espectadores que han puesto la televisión autonómica Nou se han visto sorprendidos por un cambio en la línea editorial de la cadena, que ha abierto el informativo de las 14:00 con el titular "Fabra no asume responsabilidades", en alusión a las explicaciones dadas por el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, sobre el cierre de RTVV.

A partir de ahí, se han mostrado las críticas de la oposición pidiendo la dimisión del Gobierno valenciano y la convocatoria de elecciones anticipadas por este cierre, y las protestas de los trabajadores contra una decisión que han calificado de "arbitraria". También se han sucedido los mensajes donde se ha cuestionado la multiplicación de la deuda durante los gobiernos del PP, los contratos con empresas externas, y la implicación de ex directivos de la cadena en casos de corrupción.

Mientras tanto, la etiqueta #RTVVnoestanca (RTVV no se cierra) preside la emisión televisiva, que en algunos momentos está trasladando a la pantalla mensajes publicados en las redes sociales sobre el cierre. Los trabajadores han vuelto de nuevo al plató al final del informativo del mediodía, donde los presentadores han pedido a los espectadores que hagan llegar al Gobierno valenciano que está "profundamente equivocado" en su decisión de cerrar RTVV y han anunciado una programación especial entre un gran aplauso.

La programación dirigida por los trabajadores ha comenzado a las 15:30 en la televisión y media hora antes en la radio, con la participación en directo de representantes de distintos colectivos, algunos de ellos con presencia por primera vez en RTVV, como Escola Valenciana o el sindicato estudiantil BEA. Además, ciudadanos expresan su apoyo a la continuidad de RTVV en las conexiones en directo desde distintos puntos de la Comunidad Valenciana, mientras que profesionales de la casa han contado sus experiencias y han defendido que son necesarios.

Este insólito cambio en la programación de RTVV ha sido interpretado en distintos ámbitos como un pulso alentado desde la dirección general de RTVV para presionar al Gobierno valenciano, que ha responsabilizado en parte a la directora general, Rosa Vidal, del cierre de la cadena por la forma en que ha aplicado el expediente de regulación de empleo (ERE). La cadena pública también ha emitido imágenes de las tradiciones, fiestas y deportes que dejarán de verse si se cierran las emisiones, bajo el mensaje "Sin RTVV esto no lo verás".

Frente al programa de cocina y las películas que habitualmente copan la programación vespertina de RTVV, los trabajadores han insistido en que en su programación especial, que se prolongará hasta la noche, "pueden hablar" y contar las cosas "sin manipulaciones ni presiones políticas". Los trabajadores han alertado de que si RTVV se cierra, desaparecerán "la voz y los ojos" de la sociedad valenciana, así como su derecho constitucional y democrático a ser informada, por lo que los espectadores, a quienes advierten de que son "accionistas" del ente público, son los que "tienen la última palabra".