Pepe Moral, muy firme, consigue un valioso trofeo en Mont de Marsan
Toros
El sevillano corta la única oreja del festejo; Chacón da una vuelta y Juan Leal es ovacionado
El matador de toros sevillano Pepe Moral consiguió el único trofeo de la tarde en la plaza francesa de Mont de Marsan, de primera categoría, en un festejo en el que el gadtiano Octavio Chacón dio una vuelta al ruedo y el francés Juan Leal fue ovacionado en su lote y que perdió premio por el fallo a espadas; sufriendo un corte con el estoque en los tendones. Todo ello ante una corrida de Dolores Aguirre, bien presentada y complicada en su conjunto. En el balance, con casi lleno, Octavio Chacón, vuelta al ruedo y silencio; Pepe Moral, saludos tras ovación y una oreja; Juan Leal, saludos tras ovación y saludos tras ovación.
Octavio Chacón se enfrentó en primer lugar a un toro con trapío que de salida se emplazó en el anillo. El diestro, con arrojo, apostó fuerte ante un animal complicado, reservón. El torero se lució en el toreo en redondo y no tuvo opción al natural –el pitón izquierdo, imposible–. Rubricó su labor con un pinchazo y una estocada caída y delantera. Vuelta al ruedo.
Chacón dio la talla como gran lidiador ante el cuarto, corniabierto, que peleó bien en dos puyazos y se rajó en el tercero. El gaditano comenzó su faena por alto. El astado se orientó pronto y el torero abrevió en su trasteo. Mató de un primer pinchazo en el que se cortó con la espada, pero volvió a la cara del toro para finiquitar la res. Su labor fue silenciada.
Pepe Moral no tuvo suerte con su primero, corniabierto y bastote. Toreó con buen aire con el capote y con la franela apenas pudo hacer cosas positivas, pues el morlaco se rajó pronto.
El quinto, con trapío, alto, cumplió en los dos puyazos y puso en jaque a los banderilleros. Con él, Pepe Moral estuvo muy firme, con muletazos mandones por ambos piones pitones, brillando especialmente en su fuerte, en el toreo con la izquierda, logrando los mejores naturales de la tarde ante un toro que resultó muy complicado en su juegio. Mató de estocada caída y fue premiado con una oreja.
Juan Leal se enfrentó en primer lugar a un toro cuajado, que derribó estrepitosamente en varas. El diestro francés comenzó su labor, como es habitual, en los medios. Tras unos muletazos de rodillas, el animal se coló por la diestra. Por el pitón izquierdo llegó a coger al torero por la rodilla; afortunadamente sin consecuencias. Falló con los aceros y fue ovacionado.
Cerró plaza y feria un toro muy bien presentado pero protestado por escobillado del pitón derecho. Se dejó pegar en varas y esperó en banderillas. Leal consiguió algunos muletazos estimables en el primer tramo de su labor, antes de acortar la distancia, con el toro a menos. Mató de estocada baja y todo quedó en una ovación.
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