El curriculum de Francis Alonso se sigue escribiendo con prestigiosos méritos. El malagueño revalidó el título de campeón de la Southern Conference con Greensboro tras un final de liga espectacular - han firmado la segunda mejor temporada de su historia con un balance de 24-7 en general- donde dejaron atrás a Etsu. Los Spartans lo consiguieron tras derrotar a Samford (88-75) con 14 puntos y 4 asistencias del escolta. En el rival milita el también canterano cajista Rubén Guerrero, que esta temporada no puede jugar al haberse cambiado de universidad.

El título de la conferencia permitirá a Alonso jugar directamente el torneo clasificatorio para el soñado March Madness, donde las 60 mejores universidades de Estados Unidos se juegan el título de la NCAA -solo accede una de la So-Con-. Este campeonato previo se inicia del 2 al 5 de marzo en el U.S. Cellular Center de Asheville. Greensboro comienza el 3 y su primer rival saldrá del ganador del enfrentamiento que dirimirán The Citadel y VMI.

"Ha sido extremadamente importante en ese cambio, en la construcción de una ética de trabajo y una mentalidad ganadora", decía a este periódico Wes Miller, entrenador de Alonso, en verano sobre el escolta. Bajo su influjo, Greensboro ha conseguido dos coronas seguidas en la Southern Conference, cuando su anterior entorchado data de 2005, con Kyle Hines en el equipo. Ahora lucharán por meterse en el March Madness, donde el curso anterior se quedaron a la puertas. Alonso sería el decimotercer español en jugar el torneo. Antes lo hicieron jugadores ahora en la ACB como Sebas Saiz o Iván Cruz.

El malagueño, en su año junior, está completando su mejor temporada en Estados Unidos, tercera en esta universidad. Alonso ha acabado como el segundo máximo anotador de la conferencia con 16,2 puntos por partido. Se ha convertido, también, en uno de los tiradores más fiables de la liga, siendo el tercero que más lanzamientos de tres (3,4) ha metido por noche. Promedio que le ha valido para superar su récord personal en triples metidos, con 104 en la fase regular. Igualmente ha promediado 2,9 asistencias. Números que hubieran sido complicados de conseguir sin la confianza de su técnico que ha convertido al exterior en el jugador más utilizado del equipo (29,3 minutos/partido). El Unicaja aún guarda sus derechos en España.