Esperando a Plaza

Sólo un drástico cambio de rumbo apartaría a Joan Plaza del banquillo del Unicaja para la próxima temporada. Así lo hizo público el entrenador y así se espera en el club, cuya confianza en el técnico catalán es total. El título de Eurocup fue un detonante definitivo para asumir que no hay patrón de barco más efectivo que Plaza, cuya continuidad fue reforzada ayer por todo un MVP de la Eurocup, Alberto Díaz.

"Si por mí fuese, que siga el año que viene", expresaba sin tapujos el pelirrojo, convertido en motor del Unicaja con Joan Plaza como tutor. Palabras claras del base que, sin embargo, atiende a las exigencias del calendario para evadirse de los contratos: "Nosotros ahora mismo no pensamos en eso, sería un error".

Y es que la temporada está en todo lo alto, con un play off a la vuelta de la esquina y la sensación de poder hacer algo grande para colocarle a la temporada una guinda de época. Y ahí, Plaza tiene mucho que vez. "Ha sido uno de los artífices para mejorar como equipo y para conseguir lo que hemos conseguido. Nosotros evidentemente esperamos que siga con nosotros", explicaba Díaz, cuyo crecimiento ha ido solapándose a la convicción que tiene Plaza sobre el canterano. Motor en ocasiones, excelso ladrón en otras, el base pasa por ser la prolongación de Plaza, cuyas alabanzas al pelirrojo fueron una constante desde hace meses.

He ahí el sentir del vestuario cajista, que se unió más fuerte que nunca justo cuando más palos le caían a su entrenador. Éste, con casa ya comprada en la Costa del Sol, ratificaba su posición hace un par de días en Radio Marca Málaga. De sus palabras se desprendió un mensaje de continuidad, de ilusión por la próxima Euroliga, aunque no hay que olvidar que existen cláusulas de corte por el camino.

Mientras tanto, Alberto Díaz se encargaba de analizar la actualidad verde en la vuelta al trabajo tras ocho días sin competición y un fin de semana de desconexión. "Sacamos una victoria ante Manresa y estos días de descanso, sobre todo centrados en corregir pequeños detalles, nos vana a venir bien", decía Díaz, que también recordaba el frenazo que supuso la derrota en Barcelona: "Tras esa derrota nos costó algo más seguir en la dinámica positiva que llevábamos".

Aquel traspiés llegó a domicilio, en la carretera, a la misma que saldrá este fin de semana hasta llegar a Vitoria, donde Baskonia espera en un duelo histórico y de enemistad constante, en el que podría terminar siendo un hipotético cruce de play off dadas las apreturas de la clasificación. Así, Díaz resaltaba que "siempre hay mucha rivalidad entre nosotros" y eso convierte la cita en un momento complicado, llegando los baskonistas tras pugnar hasta el último aliento con todo un CSKA en Euroliga: "Ellos están en un buen momento en liga y plantándole cara al CSKA, va a ser muy duro".

Una derrota en el Buesa apartaría al Unicaja casi definitivamente de la lucha por estar entre las cuatro primeras posiciones. Con un título ya en el bolsillo, la plantilla se afana en recortar la desventaja en los tres choques que restan hasta, en el mejor de los casos, contar con la ventaja de campo en el primer cruce de las eliminatorias por el título. Un reto complicado, con el Unicaja ya sin red, pero al alcance de un equipo regenerado en el momento más importante del año. "Es complicado pero es nuestro objetivo y queremos intentarlo. Tenemos grandes equipos por delante, pero por qué no creer en quedar entre los cuatro primeros", reflexionaba el pelirrojo, el corazón del Unicaja. El alumno aventajado al que no se le pasa por la cabeza perder a su maestro.