'Gagi', navaja suiza
El polivalente Dragan Milosavljevic, primer fichaje y último en ser presentado tras su plata en el Eurobásket, apunta alto: "Podemos ganar algún título y llegar lejos en la Euroliga"

Málaga/El primer fichaje de la temporada, gestado cuando aún se jugaba la anterior, fue el último en presentarse. Dragan Milosavljevic tiene 28 años, llevará el 12, mide 1.98 metros y nació en Krusevac (Serbia). Allí nació un ex jugador del Málaga, Stevan Stosic. Le aguarda mejor fortuna al jugador serbio, flamante subcampeón de Europa y una polivalente navaja suiza para Joan Plaza. Este verano se le ha visto jugar de base con Serbia y en el Alba Berlín lo hizo como cuatro. "Mi posición natural es dos-tres, pero puedo subir el balón como base y mandar el ataque, si hay presión puedo ayudar al base del equipo para que pueda jugar sin problema", explica el fichaje cajista, que aún no ha debutado con la camiseta verde. Presumiblemente lo hará el domingo porque el golpe en el hombro de Dani Díez hace difícil su presencia en Murcia.
Gagi, diminutivo de Dragan con el que se le conoce y que sirve para eludir el engorroso Milosavljevic (pronúnciese como esdrújula, con golpe de voz en la a), ha jugado en el pasado Eurobásket enfocado a labores más defensivas en los esquemas de Sasha Djordjevic, pero espera ampliar ese catálogo en Málaga. Viene de ser jugador de referencia en el Alba Berlín y seguramente aquí tendrá menos balón, pero Plaza ya le ha dejado claro qué quiere de él. "Eso es secreto (risas). Lo más importante es la defensa, no sólo para mí sino para todos. En ataque, tengo que ser agresivo, crear para el resto y atacar el aro", explica: "Al Eurobásket fui a jugar con los mejores y estoy orgulloso de la medalla de plata que conseguimos. En el equipo mi rol era diferente, tenía que defender, espero mostrar aquí en las dos partes de la cancha de lo que soy capaz".
No es la primera vez que Milosavljevic está en Málaga. Ya jugó con el Alba Berlín la pasada temporada. "Estoy muy feliz de estar aquí, de formar parte de un club de gran tradición como el Unicaja. Jugué aquí el año pasado con el Alba y me gusta el ambiente, la ciudad, lo que rodea al baloncesto, espero que sea un año exitoso. Jugar en Euroliga es una competición dura, especialmente en el formato que se puso el año pasado. Desde luego, la Liga ACB, que es muy posiblemente la mejor de Europa, también atrae. Tenemos un buen equipo, un buen entrenador y tenemos mucha esperanza de que podamos ganar algún título y llegar lo más lejos posible en la Euroliga", fue el ambicioso mensaje de Milosavljevic, que tiene las mejores referencias de sus compatriotas Musli y Nedovic: "Jugué contra el Unicaja y conozco el club y los jugadores. Mi amigo Dejan Musli, con el que jugué en Serbia, me dio buenos informes. Sigo la NBA y mi amigo Boban Marjanovic jugó con Ray McCallum en San Antonio, me habló muy bien de él. Nedo adora Málaga, es su segunda casa tras Belgrado. Me habló de una gran organización del equipo, del club. Y que el coach trabaja para que mejore cada jugador. La negociación, una vez llegó la oferta, no fue difícil. Dejan y Nedo fueron importantes".
Milosavljevic ha tenido lesiones de rodilla, que no le dieron problemas en los últimos años, que le han hecho "valorar este trabajo y trabajar más aún". El suyo, una navaja suiza para Plaza.
Un poco de español de telenovelas
Cuando se le cuestionó a Dragan Milosavljevic cuándo hablaría español, el serbio tuvo una curiosa respuesta: "Hablo un poquito porque de pequeño veía con mi madre las telenovelas", relataba. En el país serbio no hay doblaje en series y películas en la televisión, sólo subtítulos. Una manera de aprender.
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