Ibon Navarro habló tras el trabajado triunfo del Unicaja en Atenas, que supone un alivio por tener factor cancha en esos cuartos de final. No se podía fallar en la capital helena. "Sabíamos que el partido iba a ser muy duro. Controlamos una gran parte, excepto algunas situaciones como el rebote defensivo y especialmente la cantidad de pérdidas del segundo cuarto, que permitieron al AEK meterse en el partido. Esas fueron las grandes diferencias en la segunda parte. Controlamos esas pérdidas, controlamos los uno contra uno, controlamos el rebote defensivo. Al final del partido fuimos mejores porque estuvimos más frescos. Siendo honesto, los jugadores lesionados que no ha tenido el AEK son mucho para ellos. Janis Strelnieks es el mejor sexto hombre de la competición, de lejos, por supuesto fue un problema para ellos. También Williams es un jugador en el que hay que poner el foco en ataque porque convierte muchos triples. Estos dos jugadores que faltaron hoy son muy importantes para el AEK. Hay que ser sinceros".

Ya miran los malagueños al sorteo del viernes. "No tenemos una preferencia. Hemos hablado esto antes (risas). Cualquiera que venga, va a ser el peor. Los entrenadores somos así. Por supuesto, prefiero que no sea un equipo español. Nos conocemos demasiado y esto es una gran ventaja para el equipo con menor nivel. Cualquiera que venga va a ser bienvenido", finalizaba el vitoriano.

La BCL queda aparcada por el momento, a la espera de conocer el rival en esa última ronda antes de la Final Four. La próxima parada de los malagueños será el derbi andaluz en San Pablo, este domingo a las 12:30. Días de descanso que vienen de maravilla por cómo de justa está la plantilla, pero con los deberes hechos y habiendo salido de un enredo peligroso. También se necesitan victorias en ACB.