Las Ventanas FIBA están permitiendo la recuperación de jugadores que parecían fuera de la esfera de las selecciones. También a hombres que, en clave Unicaja, jugaron en Málaga y parecían fuera de la circulación. Es el caso de Gustavo Panchi Barrera, que se convirtió en uno de los héroes de la selección uruguaya que ganó un partido de gran nivel a Argentina (83-88). Barrera metió 10 puntos y varias canastas decisivas para el triunfo de la celeste en un duelo de máxima rivalidad, con una Argentina de buen nombre, con Scola, Laprovittola, Brussino o Delía.

Panchi jugó 16 partidos con el Unicaja. Comenzó la temporada 2010/11 después que fuera una petición de Aíto García Reneses, que le conocía de cuando era un prometedor proyecto en el Joventut de Badalona. Problemas con su pasaporte español dilataron su llegada a la élite y por ahí perdió comba. Se marchó después de que se viera que no daba el nivel.

La carrera de Panchi regresó a Sudamérica después de un paso por Granada. Venezuela, Argentina y Uruguay han sido las paradas siguientes en su carrera. Con 32 años le llegó un momento de gloria. Salió en silla de ruedas por un golpe, pero viajó poco después a Panamá.