El Unicaja de Liga EBA jugó su primer partido oficial en casa de la temporada, dentro del Grupo D-A de la competición. Después de una amplia derrota en la primera jornada en Almería, el filial cajista respondió con una contundente victoria ante el Vikingos Syngenta Murgui (100-69) en Los Guindos. Alberto Díaz y Jonathan Barreiro, jugadores del primer equipo, estuvieron contemplando las evoluciones de los chicos de Antonio Herrera, que hicieron un partido completo tras caer en la semana previa en la pista de uno de los mejores equipos del grupo.

Los jóvenes cajistas pusieron velocidad de crucero y desde el comienzo del partido dominaron y colocaron tierra de por medio con distancias cómodas. Es un equipo que por dentro tiene menos nivel a priori que el año pasado (Oneutu y Tanchyn pasaron a senior y Folgueiras se fue a EEUU) pero que por fuera conserva a los jugadores más prometedores de esta generación. Y la conjunción de Álvaro Mena, Mario Saint-Supéry y Rubén Vicente debe darle para sacar partidos en la categoría. Dos cadetes (Manuel Trujillo y Rubén Salazar) juegan minutos de calidad y la mayoría del equipo es de primer año, sólo Mena y Vicente son de segundo entre los que tienen peso. Falta alguna incorporación para el interior, se espera la llegada del danés Marcus Moller.

Saint-Supéry, después de un primer partido en Almería el que salió con faltas tras sólo ocho minutos y que le recordó que hay ritmos distintos entre ACB y EBA, demostró que está varios cuerpos por encima de la categoría. Bordeó el triple doble el MVP del Europeo sub 16, con 17 puntos, nueve rebotes, siete asistencias y tres robos para 30 de valoración en 20 minutos en pista. Repartiendo juego, atacando el aro o con algún tiro lejano sacó la cabeza por encima y con buena actitud para exprimirse en cada segundo en pista. El máximo anotador fue Álvaro Mena, que tan buena impresión causara en el primer equipo en los partidos de pretemporada, con 22 puntos (5/6 en triples) y seis rebotes para 25 de valoración en 18 minutos. Matteo Casero, otro junior de primer año, hizo 16 puntos y cuatro asistencias, Rubén Vicente firmó 14 puntos y siete rebotes y Juan Antonio García 12 puntos (4/6 en triples) y cuatro robos.

La idea es similar a la años anteriores, correr y generar las situaciones más rápidas posibles para encontrar tiros cómodas. En este partido se metieron 21 triples de 46 intentos. El susto final lo dio Baba Badji, que tuvo un problema en el tobillo, con gritos de dolor que impactaron. No parecía demasiado grave. Se prevé un año menos ganador que el pasado, pero el objetivo final, nunca hay que olvidarlo, es el crecimiento de los jugadores.