Alberto Miranda, oro en mano: "Un verano extraordinario; ahora estoy encantado de estar con mi club, mi gente..."

En una nube está Alberto Miranda, flamante campeón del Eurobasket con Alemania y redondeando una experiencia perfecta en el staff de la selección germana. Cambio de chip exprés, de complementar a Álex Mumbrú a hacerlo ya con Ibon Navarro en la Copa Intercontinental. Miranda voló desde Riga a Singapur y prácticamente arrancó la aventura a la vez que el resto de la expedición. "Estoy encantado de estar al otro lado del mundo con mi equipo, mi gente, con vosotros (trabajadores del club). Aunque el trabajo con la selección sea muy satisfactorio, y esté muy condesado, pero al final sabes que tu casa y tu gente es esta, que tu club está trabajando. Es duro estar en el Eurobasket y ver que el equipo está en pretemporada, empieza a trabajar, tú no estás allí y no puedes ayudar. El estar aquí para mí es un chute de energía. Encantado de haber venido lo antes posible para disputar esta Copa Intercontinental, de conocer a los nuevos y juntarnos con los que llevan más tiempo. Deseando que empiece la competición, estar en el Carpena, volver a Málaga y ver a mi familia, y estar día a día con este equipo, algo que es muy bonito y satisfactorio", explicaba el técnico salmantino en los micrófonos del club. Ha caído ese oro alemán como una gran alegría en el Unicaja.

"Por cómo ha acabado todo, ha sido un verano extraordinario. Mucho trabajo y esfuerzo desde que te concentras con una selección nacional; muchos días fuera de casa y estar lejos de la familia, y eso es quizá lo más duro. Pero acabar con una recompensa como la que hemos tenido en el Eurobasket de este año con Alemania hace que merezca la pena todo", feliz Miranda y posando con ese metal imponente. "Es una medalla grande y sobre todo es un gran recuerdo de lo que ha supuesto este verano, además siendo mi primera experiencia en la selección nacional. Una experiencia dura por la enfermedad de Álex y por todo lo que hemos pasado en el campeonato, pero satisfactoria porque trabajas con jugadores de un calibre increíble, de una calidad inmensa, y también te pone a prueba en cuanto a baloncesto, el trabajar con esta gente. Y a nivel de resultados, no se puede pedir más: hemos ganado todos los partidos en el torneo. Somos la única selección que ha acabado invicta, y hemos hecho un baloncesto divertido y atractivo de ver; por eso, además de la medalla, pues estamos muy contentos y satisfechos con todo lo que ha pasado este verano".

Ya en modo Intercontinental, Miranda decía que el Unicaja "tiene que estar preparado para lo desconocido. Porque en este caso el campeón de África, el Al Ahli, ha cambiado prácticamente toda su plantilla que fue campeona el pasado año en la BAL. Son jugadores nuevos, que tienen calidad y que no sabemos cómo van a conjuntar. Lo que tenemos que centrarnos es hacer nuestro trabajo, en crecer como equipo y hacer lo que han ido haciendo los jugadores durante la pretemporada. Para este primer partido, con poco tiempo, vamos a preparar información a nivel individual y con eso, más que lo venimos trabajando, esperamos que sea suficiente para competir a gran nivel", señalaba el entrenador ayudante. Alguna pincelada más. "Estamos acabando la pretemporada. Esa es la realidad, aunque este sea un título oficial, nos tiene que servir para crecer y prepararnos para lo que viene durante todo el año. En cuanto al rival, hemos hecho poco trabajo en pista, algún detalle de cómo juegan ellos a nivel defensivo. Tienen un jugador determinante que es Marcos Knight, que marca diferencias y que va a asumir bastante juego. El juego interior es fuerte, con muchos kilos, y que nos puede dar problemas por nuestra estructura de plantilla. Y poco más allá hemos trabajado. Queremos imponer nuestra manera de jugar, nuestro ritmo que, aunque ellos quieran aprovechar su peso, ganemos en velocidad. Hacer nuestro partido y que las cosas vayan a nuestro lado".