Los equipos de cantera del Unicaja suelen ser corales, sin jugadores demasiado descollantes individualmente dentro de un nivel alto de todos sus componentes. El equipo infantil masculino ha finalizado octavo en el Campeonato de España disputado en Galicia esta semana. Perdió con el Tecnyconta Zaragoza por 71-75. Pero un nombre ha llamado bastante la atención a nivel nacional, el de Álvaro Folgueiras.

Folgueiras sumó en el último partido 33 puntos y 21 rebotes, aunque no pudo guiar a su equipo al triunfo. Pero ha completado una semana brillante, en sintonía con la progresión durante la temporada del equipo de Manolo Bazán, que no pudo meterse en la Minicopa pero que ha mejorado hasta colarse entre los ocho mejores de España, con un sobresaliente partido de cuartos de final ante el Madrid, en el que obligó al equipo blanco, dominador en categorías inferiores, a dar una gran versión (88-76). Folgueiras hizo ahí 33 puntos y 14 rebotes. Sólo se perdió en la fase previa ante el Barcelona y se ha competido de manera excelente en cada partido, aunque contra el Zaragoza se llegó con la gasolina justa.

Si se elimina el partido de octavos, en el que Manolo Bazán apenas le puso tres minutos en pista para reservarle para el cruce de cuartos, las medias de Folgueiras en el Campeonato fueron de 26.8 puntos, 14.2 rebotes y 37.8 de valoración, cifras normalmente al alcance sólo de jugadores africanos que dominan por el físico en este tipo de Campeonatos y que dan idea de la versatilidad del jugador paleño.

Empezó la temporada con 1.89 metros, jugando como alero, pero ha crecido físicamente y en juego en estos meses Folgueiras hasta convertirse en el líder de la generación de 2005 que ahora pasa a cadete. Su hermano Nacho jugó también en la cantera del Unicaja y ahora lo hace en Novaschool. De cuerpo idóneo para la práctica del baloncesto, capaz de hacer muchas cosas diferentes sobre la pista, Álvaro ya está lógicamente en el radar de la FEB para próximas citas.