Antonio Martín ha sido elegido como presidente de la Asociación de Clubes de Baloncesto, más conocida como ACB, tras la Asamblea General Extraordinaria celebrada en Madrid este martes. Los clubes que forman parte de la Asociación han reelegido al madrileño que ostentará el cargo hasta 2029. Será el tercer mandato de Martín tras ser nombrado presidente por primera vez en julio de 2018. Renovó su cargo en 2021 y, ahora, lo vuelve a hacer por cuatro años más.

Antonio Martín ha querido “dar las gracias a los clubes en todos los sentidos, por el apoyo a la ejecutiva a lo largo de estos años”. “Vamos a ir a por todas para que los 18 clubes, pese a sus diferentes naturalezas, tengan motivos para estar satisfechos. No vamos a prometer, más bien nos vamos a comprometer para crecer en todos los proyectos y desafíos que tenemos por delante", añadió el presidente.

“Afrontamos ahora muchos retos, como aumentar la visibilidad de la competición, continuar el crecimiento en la generación de ingresos o ser cada vez más atractivos para el público”, explicó Martín, para lo que “es fundamental el apoyo que han mostrado los clubes al proyecto”.

El pasado 11 de agosto, la Comisión Electoral de la ACB informaba de la candidatura presentado por el máximo dirigente en los últimos cuatro años, añadiendo que era la única y que “cumplía con los requisitos establecidos en el proceso electoral”.

El Unicaja, libre del condicionante Copa Davis

El Unicaja conoció su calendario de la ACB al completo. A diferencia de las tres temporadas anteriores, sin el peso de la Copa Davis, que cambia Málaga por Bolonia (Italia), generando respiro en el seno del club malagueño. Se tenía que dejar el Carpena alrededor de un mes a partir de noviembre, trasladando el cuartel general a Los Guindos, un trabajo logístico que ocasionaba un profundo recelo en la entidad. Alguna vez lo han manifestado Ibon Navarro o López Nieto, la complejidad de ese trasiego y los impedimentos en el día a día. Desde el 2022, el Unicaja tenía que coger la maleta y hacer ese exilio en noviembre, una desventaja importante en el calendario porque el equipo malagueño tenía que disputar hasta tres jornadas seguidas como visitante en algún caso (23/24), y por medio la BCL, con la fatiga extra de viajar mucho.

Un condicionante en la clasificación para la Copa del Rey por el 8-9 en la primera vuelta: más partidos fuera que en casa. Ahora el Unicaja recupera esa pequeña ventaja. Jugará nueve jornadas en el Carpena en la primera mitad. Se arrancará con el Bilbao Basket de Pantzar el 4 o 5 de octubre y a partir de ahí vendrán el Barça (18-19), otra cita potente que llega muy pronto; Girona, Manresa, San Pablo Burgos, Baskonia, Joventut, Covirán Granada y UCAM Murcia. "Uno de los datos importantes de la primera vuelta, en la que está en juego la clasificación para la Copa del Rey que se celebrará del 19 al 22 de febrero en Valencia, es que el Unicaja disputará 9 jornadas como local y 8 como visitante", hasta lo celebraba el club en su página web.