Ebuka Izundu, una apuesta de Juanma Rodríguez

El Galatasaray se zampó al Tenerife con una segunda parte de culto. Dentro de ese nivel enorme del conjunto turco, sobresalió especialmente Ebuka Izundu (Carolina del Norte, 1996), un jugador que Juanma Rodríguez fichó para el Betis en 2019, aprovechando ese mercado underground que es la G-League. El director deportivo del Unicaja rescató al pívot con pasaporte nigeriano tras no ser drafteado en 2019 y con poco peso en esa liga satélite, sin opciones de rascar contrato NBA, pero al que se le atisbaba potencial. Un mercado que Rodríguez monitorizaba y un caladero obligatorio para equipos como el Betis por aquel entonces, en economía de guerra, recién ascendido a ACB. Viajes por Europa años después hasta llegar a este Galatasaray. Viene de hacer una exhibición física en la semifinal (21 puntos, 10 rebotes y 28 de eficiencia), devorando la pintura de Tenerife. Una mole de 2.08 que dominó ambos aros y ese músculo al que aludía, en parte, Ibon Navarro antes de la final. "Es el equipo más físico al que nos hemos enfrentado en BCL". Un poder absoluto de la semifinal en los 22 minutos que jugó, con 10/11 en tiros. Y la candidatura más clara del Galata en el MVP de la Final Four.

"Nuestro ataque se basa en bases y pívots, viviendo el momento y jugando el partido. Me dejé llevar. No empezamos bien, pero intenté ayudar a mi equipo a ganar. Me encanta jugar con Sadik (Kabaca); estar en la cancha con él me da energía. Intentamos jugar juntos. Will es un gran líder; facilita el trabajo. Jugar con él ha sido divertido, viendo la mayoría de las asistencias. Intentamos jugar juntos, y ha funcionado bien toda la temporada. No me importa contra quién juguemos, el objetivo es llegar y estar listos para luchar", dijo Izundu tras esa semifinal estelar. No jugó en la derrota del Unicaja en Estambul, sí en el Carpena (8 puntos y 4 rebotes). Promedia 9.8 puntos, 6.8 rebotes y 15 de eficiencia en BCL, con un peso creciente durante la temporada. Cuatro dobles dobles esta temporada en BCL en solo 18 minutos de media.

Se formó en la Universidad de Miami, donde jugó cuatro temporadas. Además, disputó la Summer League con Golden State Warriors antes de dar el salto al baloncesto europeo. En el Betis, ese curso 19/20, jugó 16 partidos (4.4 puntos y 3.3 rebotes). Llegó la pandemia y no continuó en Sevilla. Ficha por el Estrasburgo, un salto, equipo con cierta tradición en BCL, aunque en Francia solo está media temporada tras firmar por el FMP Soccerbet de Serbia, hasta final de temporada. Buenas temporadas en la ABA (9.1 puntos y 5.8 rebotes en la primera, 8.4 y 5.4 en la segunda) y consigue una buena oportunidad en Alemania, en el EWE Baskets Oldenburg, donde hace 8.2 puntos y 3.8 rebotes en BCL, los alemanes cayeron en la primera fase. Y una explosión que ha llegado en el Galatasaray a sus 28 años (cumplirá 29 en junio).