Unicaja
  • Boza Maljkovic, Joan Plaza, Carlos Cabezas, Berni Rodríguez y Carlos Suárez rememoran las mejores épocas de la historia del Unicaja, con los cuatro trofeos levantados por el club

  • Las fotos del encuentro

La fórmula para ganar títulos

Los protagonistas de la charla. Los protagonistas de la charla.

Los protagonistas de la charla. / Javier Albiñana

Bozidar Maljkovic llegó a Málaga el verano de 1999. Había ganado cuatro Euroligas en la década previa. Dos con la Jugoplastika, donde forjó quizá el mejor equipo de la historia del baloncesto europeo, uno con el Limoges, en una epopeya de película tras ganar al Madrid de Sabonis y a la Benetton de Toni Kukoc, y otro más con el Panathinaikos. Dos años después de esta última aparecía por Málaga para darle el salto de calidad definitivo al Unicaja de manera integral como club. La fórmula para enseñar a ganar, para tocar plata. Una creciente inversión lo posibilitó. El gran Boza (Otocac, 1952) presidía la tercera mesa redonda "Los Títulos: una época dorada" que organizó el club para conmemorar los 30 años de la unión Caja de Ronda-Maristas. Con él un elenco que escribe lo más grande de la historia del club. Sus pupilos Carlos Cabezas y Berni Rodríguez, a los que amamantó para ganar la Korac de 2001 y poner las bases de los títulos de 2005 y 2006 en Copa y Liga y, con ellos, Carlos Suárez y Joan Plaza, capitán y técnico de la Eurocup, el último título que ganó la entidad.

La Sociedad Económica Amigos del País acogió el evento, con una sala atestada. Reverencias y ovación para Boza, hombre que llevó el baloncesto a otra dimensión. Con retranca y un humor fino arrancó carcajadas de los presentes. Bromeaba con Ángel Fernández-Noriega, entonces presidente y también presente. "Nunca me invitó a ir a su despacho, era más bonito que el de Braulio Medel. Pensaba que, si veía el despacho, cuando observara ese lujo y belleza iba a pedir más dinero... Siempre nos reuníamos en restaurantes, Martín Carpena o Ciudad Jardín", le espetaba. "Entrenamos mucho, mucho", le reprochaba, con buen tono, Berni: "Dos horas y media. Teníamos 19-20 años y lo aguantábamos. Entonces él reía y nos ponía a hacer unas series de líneas para acabar. 'Esto es para dormir mejor', nos decía". "Siempre se puede dormir mejor", remachaba el serbio. Con 20 años justamente nombró Boza capitán a Berni. "Estaba con la sub 20 y me llamó Juanma Rodríguez. Yo pensaba que estaban Veljko, Sonko, Abrams... ¿No había más gente? La primera gran bronca como capitán fue porque otro compañeros estaba apoyados en la canasta y eso decía Boza que transmitía desgana. Entonces me tiraba todo el entrenamiento corrigiendo. Estaba obsesionado después toda mi carrera con contar todo, qué horas es, no podemos llegar tarde... Esto lo aprendí de Boza", recuerda el eterno 5 cajista.

 

"En la última Final Four de Belgrado yo iba con la tele. Un mes antes me dijo Boza que quería invitarme cuando estuviera allí. 'No te olvides Berni, ven a comer con unos amigos'. Allí me encontré a Juan Carlos Navarro, Audie Norris, Dino Radja, Naumoski, Pesic, Bodiroga, Epi... Allí le dije a Dino Radja 'Siento decirte que te he odiado toda la vida'. Él se quedó parado. Le expliqué que Boza durante los cuatro años no paraba de repetir cuando nos quejábamos por algo 'Dino Radja se doblaba el tobillo y salía a jugar'... Me doblé el tobillo en un entrenamiento. Y Boza decía 'Llamen a su mamá, que se ha doblado el tobillo. ¿Puedes entrenar o no? Dino Radja hacía así en el suelo y jugaba'... En una semana aprendimos cómo debía ser un buen profesional, serio. No lo técnico, sino de toda esa parte de persona como deportistas. Aprendimos mucho de Boza, con unos veteranos que nos arroparon mucho", rememora Berni. "Era muy gracioso, estuvo con Audie Norris hablando. ¿Sabes cuando fichaste por Barça qué me dijiste en la primera reunión contigo? Tú eres buen jugador, pero nunca juegas bien", reía Boza: "Dino entrena cada día, su mujer es modelo. Entrenan cada día pesas, corriendo. Podría jugar aún. No importa la edad, importa si tienes talento o no lo tienes. Él juega en Segunda División de Croacia y nadie le para".

Boza Maljkovic, aplaudido. Boza Maljkovic, aplaudido.

Boza Maljkovic, aplaudido. / Javier Albiñana

La charla, conducida por el periodista Emilio Guerrero, va soltando de momento alegre en momento alegre. Se habla del último título, la Eurocup de 2017. "Fue un guión de Hollywood. Cómo ganamos al Bayern, Lokomotiv y Valencia, con el factor cancha en todas las eliminatorias. Fue un año muy duro y nos hizo más fuertes a lahora de la verdad. Tuvimos muchas adversidades. Me hice un viaje a Rusia de 20 horas para jugar en Krasnodar y el día antes me había comido unas conchas finas, me sentaron falta y no pude jugar. El equipo dio un paso adelante y sacamos el partido. El partido de Valencia el tercero, con la lesión de Musli, con Viny de segundo pívot y Omic expulsado... Ellos se confundieron, jugadores y público cantando 'campeones, campeones...'. Ese grupo se unió ante las adversidades y pudimos ganar ese trofeo. Yo pensaba que se habían cargado el partido los árbitros. Mete una canasta Brooks y le dije a Alberto que estaban acojonados. Fallan en una jugada seis triples tras coger cinco rebotes tirando solos. Les afectó la presión, veían levantándose la Eurocup. Fue mérito al staff, honestamente no pensaba que podíamos hacer eso, éramos el equipo con peor balance en cuartos de final. El staff nos machacó con que si ganábamos el tercer partido en Múnich ganábamos la Eurocup. Gané el primer título de la era Laso en el Madrid, una Copa en el Sant Jordi ante un pabellón lleno de barcelonistas. Pero lo de Valencia le supera", recuerda Carlos Suárez.

"Habíamos perdido dos veces con Bayern, cuatro partidos con Valencia... Había que convencer al equipo de que había que llegar al último cuarto vivos. Se ganó en Múnich, esa noche en la cena se generó una atmósfera especial y vino lo de después. Había 8.000 personas con mi barba el día del Lokomotiv, el pabellón reventó, es algo que nunca olvidaré", recalcaba Joan Plaza: "Ellos creyeron, Alberto dio un paso adelante, juega Viny Okouo, Carlos jugó de cinco contra Dubljevic. El equipo creyó. 300-400 personas fueron a Valencia y había muchas razones para dejarse la piel y fue una de las victorias más sorpresivas.Entramos en dinámica, se cumple esa situación. Visualizaron que podíamos remontar aunque teníamos problemas. Nedovic no estaban en pista, tuvimos que sacar trucos... Boza gana una Copa de Europa con el Limoges con una banda de amigos. Yo aprendía mucho de él. Yo estoy aquí gracias a él, lo dije varias veces pero lo recuerdo. Si estoy en la élite es porque me abrió la puerta para estar con él de ayudante en el Real  Madrid. Nos conocíamos porque yo estaba en Badalona e iba a Limoges a verle entrenar. Me llevaba a restaurantes sofisticados, a comer cosas extrañas... Aprendí mucho y fue un auténtico maestro".

"El impacto que tuvo la llegada de Boza para el baloncesto en Málaga fue enorme", desliza Carlos Cabezas: "La primera frase que nos dijo no se me olvidará, llegábamos teñidos de rubio después de haber ganado el Mundial junior en Lisboa. 'Muchos campeones del mundo en mi país, a cortarse el pelo', fueron mis primeras palabras con el maestro. Nos pilló a Germán, Berni y a mí muy niños. Aprendimos de la escuela balcánica, lo toleramos muy bien por la edad. Ganar la Korac en Belgrado fue grande para Málaga".

Un pelotazo en los testículos que recibió el francés Mous Sonko propició una de las anécdotas más recordadas de Maljkovic en Málaga. El serbio salió a la cancha en el Carpena en un partido contra Ourense. Y empezó a darle patadas en las plantas de los pies. A los pocos segundos, el francés se había levantado. "Es medicina antigua, pero muy buena", bromeaba Boza: "Tenía unos amigos que eran boxeadores, karatekas o judocas. Y me lo decían que eso curaba. Ahora soy presidente del Comité Olímpico Serbio y conozco más otros deportes".

Ese título de Korac llegó en 2001. El Unicaja era favorito y cumplió. "No doy nunca un pronóstico es para meteorólogos y ellos fallan, dicen que llueve y hace sol y al revés, pero no es para entrenadores. Yo sabía que el Hemofarm Vrsac era un buen equipo, con dinero, con una gran empresa farmacéutica detrás, pero que no tenían el talento del Unicaja. Ganamos por 30 aquí. Después el hotel celebramos fiesta. Pensé 'Esta gente te conoce como hombre duro, crítico, cara larga...' Y dije, 'voy a cantar para que vean que no soy así'...  No soy Julio Iglesias o Antonio Banderas, pero no canto mal. Llamé a un amigo y trajeron una orquesta, gasté muchos euros esa noche", bromeaba Boza con aquella celebración, antes de destacar el tratamiento del club para con Carlos Cabezas y Berni Rodríguez al nombrarles embajadores: "Es muy bueno nominar embajadores y que se celebren estos actos. Todos los grandes clubes tienen estas personas. Manolo Flores es el mejor representante del Barcelona, Butragueño en el Madrid de fútbol. Cada club tiene uno y siempre gana el equipo que tiene más jugadores de casa. Mucha gente muy buena vinieron, cumplieron su contrato, se fueron... Pero ellos se quedan aquí toda la vida. Es muy importante, una muy buena política y estrategia. Nadie entiende la capacidad del club, si puede o no, que ellos dos. Tienen capacidad y autoridad, que otros no tienen. Por eso es muy importante tener gente de casa. Este acto demuestra que el Unicaja está por encima de todos. Esta documental que hicisteis y me mandasteis... Es maravilloso. No sólo es opinión mía, gente que conoce el baloncesto, mis colegas, mis ex jugadores. Se lo mandé a todos y todos me decían lo mismo: excelente. No he visto mejor documental, es un documento fantástico".

La Copa de 2005 fue el primer título nacional del Unicaja. Victoria en la final ante el Real Madrid... de Boza Maljkovic. "No me acuerdo", decía con gracia el serbio ante las risas de la sala. "Nos clasificamos la última jornada, de rebote. Nos tocó Alicante, que era muy buen equipo, pero no era el mejor rival de los cabezas de serie. Ganamos semifinales contra Valencia con aquella zona 1-3-1 para remontar. Nos tiramos dos meses haciendo en entrenamientos una zona que nunca sacábamos. Sergio la sacó y Walter Herrmann su manita y jugamos en la final. Recuerdo que teníamos que correr detrás de Louis Bullock, fue un partido muy igualado".

Boza Maljkovic y Joan Plaza dialogan. Boza Maljkovic y Joan Plaza dialogan.

Boza Maljkovic y Joan Plaza dialogan. / Javier Albiñana

"Tanto la Korac, como la Copa y la Liga en Vitoria... Fue apoteósico ante un rival todopoderoso. Nos tiraron de todo tras ganarle al Baskonia. Tanta gente, tantos niños en el balcón, fue apoteósico, cómo vivió esos años Málaga. Fue año tras año. 2005 Copa, 2006 Liga, la Final Four no fue un título, pero ese triple de Pepe fue inolvidable", evocaba Cabezas. "Es una historia que hemos cambiado, hemos ganado por primera vez. Yo sabía que era la última competición que llevaba el nombre de Korac. Y pensé que sería bueno que fuéramos a visitar la tumba de Radivoj. Me llamó su hermano, que es un escultor muy conocido, catedrático, que era un buen gesto", apunta Boza Maljkovic sobre aquel título.

"El momento de levantar la copa no tiene comparación", asegura Berni: "La Korac pesaba mucho y al llegar a casa tenía agujetas de llevarla a pulso. Recuerdo mucho cuando ganamos la Liga y compramos las pelucas. Sería un poco injusto ir con la mochila de esa final que perdimos en 2002 con Baskonia. Sentíamos la oportunidad de revancha deportiva. El Baskonia era todopoderoso". De aquella final perdida de 2002 se acuerda Maljkovic y habla sin tapujos: "Nos robaron la final, nos mataron. Tau Cerámica tenía mejor equipo, clase por encima de la nuestra. Estuve en Baskonia años después cuando Perasovic tuvo un infarto. Nos mataron los árbitros. Hay que saber que en 20 años jugando en Euroliga y Copa de Europa no tuve una falta técnica, pero ese día sí. Soy muy correcto, pero si viene el ladrón y te coge dinero hay que defenderse. El arbitraje fue malísimo. El partido se puede ver hoy, animo a quien lo quiera ver y me diga si no es verdad".

La Final Four de 2007, opinan Cabezas y Berni, es equiparable a un título, ese que nunca se levantó en Málaga, sino en Vrsac, Zaragoza, Vitoria y Valencia. "Sería el día que más lleno vi el Carpena, rozando la ilegalidad. Yo pensaba 'Si pasa algo no sé si salimos de aquí'. Fue un día increíble", precisa Berni: "Ganamos bien el primero, perdimos bien el segundo. Recuerdo el tercero corriendo detrás de Juan Carlos. Y después salir con el champán, todos tirándonos en plancha. Lo consideramos casi un título, hubo celebración, una cena todo el equipo. El viaje a Atenas fue grande, para el Unicaja fue algo precioso. Marko Tusek y Marcus Faison estaban tocados, Santiago fuera, Marcos Brown volvía de una lesión, muchos minutos con Flo jugando de cinco. Partido de caraperro. Veníamos de jugarle de tú a tú, al Barça. Teníamos la bola decisiva, Sergio sacó a los tres pequeños en cancha. 'Atacamos a Navarro', fue la orden de Sergio. A quien nos defendiera de los tres, ahí íbamos. En el cambio me quedé con Basile y Navarro con Pepe, me fui, abrí... Y ya se sabe lo que pasó".

No anduvo lejos de jugar la final de la Euroliga el Unicaja. Dominaba en el último cuarto al CSKA. "Estábamos jugando haciendo un partidazo a un equipo que tenía a Palaploukas Holden, Andersen... Con un esfuerzo tremendo, casi sin pívots, Iñaki de Miguel era el más grande. Llevaba ocho puntos seguidos, meto canasta con falta, un chico venezolano que tenían, Óscar Torres, me mete el dedo en el ojo. Al día siguiente Messina vino a pedirme disculpas. No sé si fue a cosa hecha. Me rompió el lagrimal y no paraba de sangrar por el conducto donde se llora. El equipo jugaba de tú a tú y me sacaron el partido. Al Baskonia le ganamos el día después. Llego al hospital, me opera un doctor, en un sitio con poca luz, yo miraba al doctor Carlos Salas y pensaba '¿Dónde estamos?'. Tuve la suerte de que estaba de guardia una de las mejores oftalmólogas del país y llegó para arreglarlo. Cómo nos acompañó la gente de Málaga... Jugar la Final Four es lo más bonito. Es muy difícil llegar a una final, muy difícil, el esfuerzo que cuesta llegar, lesiones puntuales, cosas que no controlas... Cuando ganas ni te imaginas lo que cuesta", relata con emoción Carlos Cabezas.

Imagen de la exposición. Imagen de la exposición.

Imagen de la exposición. / Javier Albiñana

Berni halagaba a Carlos Suárez,  las dos únicas personas que levantaron un título del Unicaja, cómo fue la foto de Valencia. "Fue una foto icónica, sacando el músculo como Pablo Raez. Me da un poco de rabia que tu foto sea la más bonita", bromeaba Berni. "Lo hice porque Pablo Ráez falleció poco antes. Vino a vernos un partido y nos transmitió una cosa brutal, le hicieron un homenaje. Nos dijo que había que ser siempre positivos. Un poco antes del primer partido ante el Bayern nos dijeron que había fallecido. Lo pensé en la tarde del tercer partido y lo hicimos. Pensaba que me iba a costar ser capitán, no me gustaba, nunca había tenido esa experiencia, pero lo llevé bien. Llegamos a las 3 de la mañana a Málaga y ese momento fue increíble, las calles con el autobús nunca lo había vivido", responde el madrileño.

"Pretendíamos españolizar el equipo", recuerda Joan Plaza sobre aquellos años que derivaron en la Eurocup: "Alberto se había incorporado dos años antes. Él era más sensato, con Carlos nos representaba muy bien a todos. No canté como Boza, pero bailé, la ocasión lo merecía. Ver a la plaza llena de gente, abarrotada... Ha sido la última vez que he bailado, si a eso se le puede llamar bailar. El aeropuerto abarrotado fue emotivo. Míchel era el entrenador del Málaga y me llamó al día siguiente bromeando, que se creían que era para ellos porque el Málaga había ganado en Gijón un partido esencial para salvarse. Fue todo natural, una sensación difícilmente repetible. Llegas a casa y pensaba cómo había tanta gente allí, que aguantara tan tarde. Fue un momento muy especial".

"Jugamos una final de Supercopa y Copa en Málaga, pero no pudimos ganar ese título en Málaga. Tuvimos un partido contra el Madrid en semifinales y pedimos con el Barça la final en la Supercopa. Después en la Copa jugamos viernes, sábado y domingo y pillamos al Madrid en el mejor momento de la temporada. El recibimiento para la final de Copa en el Carpena también lo tengo en la memoria, estaba a reventar. Es la espinita, no haber ganado en Málaga, pero dentro de dos semanas, esperemos que sea allí en Barcelona. Siempre que se gane...", señalaba Suárez sobre aquellos recuerdos.

Boza Maljkovic, aplaudido. Boza Maljkovic, aplaudido.

Boza Maljkovic, aplaudido. / Javier Albiñana

"Fue una injusticia que Málaga se quedara sin la Euroliga. Se redistribuye, no nos dan la licencia A. El presidente nos comunica que nos echan y vamos a Moscú y ganamos. Se silbó el himno en cada presentación. Yo pensaba 'encima los árbitros nos van a matar...'. Devolvimos al Unicaja donde debíamos estar. Quedamos novenos al año siguiente, a una plaza de jugar el play off. Queríamos jugarla y la gente de Málaga también", señalaba Joan Plaza.

Fueron cuestionados todos los protagonistas por qué jugador escogerían de los que jugaron en el Unicaja o fueron entrenados con ellos. "Marcus Brown", respondía sin dudar Berni: "Me llamó Juanma Rodríguez, estaba jugando la selección B. Y me decía que quería llevar el 5, que le llamó el agente. Al día siguiente igual, que insiste. Al día siguiente me dice que me va a comprar el número. Yo empiezo a decir que era el número de mi padre. Yo pensaba que a ver cómo respondía éste cuando empezamos la pretemporada. No hubo ningún problema. De hecho, me voy a Murcia y jugué el 41 el resto de mi carrera por hacer igual que Marcus. Cuando él jugó en Kaunas y le visitamos allí para jugar contra el Zalgiris le dije "si vuelves te dejo el 5". Pero me dijo que estaba muy viejo".

Suárez decía que se quedaba con "la mejor pareja de escoltas. Nedovic en el tercer partido en Múnich fue líder total y Jamar Smith en el segundo y tercer partido con Valencia marcaba diferencias. Son los que más me determinantes fueron".

"Garbajosa, es un líder y nos ayuda a ganar Copa y Liga. Marca una época en Málaga. Y también Walter Herrmann, le tengo un aprecio y cariño enorme, con aquella tragedia familiar que tuvo el tipo se comportó espectacular, nos enseñó a afrontar la vida. Ahora lo hemos fichado para el equipo de veteranos", desvelaba Cabezas.

"Louis Bullock", opinaba Maljkovic. "En los cinco años hubo muchos, fuimos una cooperativa. Alberto, Carlos, Domantas, queríamos que crecieran jugadores desde abajo. Nemanja Nedovic y Jamar Smith... Hay una amalgama de muchos jugadores. Éramos de sumar muchos 10 puntos. El único que podía romper algo era Nemanja, que no había triunfado en Valencia y Golden State y encaja perfectamente aquí", recuerda Plaza.

¿Y el Unicaja actual? "Ha vuelto a ilusionar, cada fin de semana lo vemos. La afición está cada vez más con el equipo, se ha vuelto a enganchar, compite hasta el final, pierde partidos, pero tienes que matarlos cuatro veces. El sorteo de la Copa ha sido complicado. Ha tocado un coco y si ganas te toca el Madrid. Sería bonito eliminar al Barça en competición doméstica. Y en BCL es el serio candidato al título", vaticina Suárez.

"Hay muy buen entrenador, las cosas se hacen bien, el equipo tiene una estructura muy sólida. No descarto nada, nadie juega cómodo contra el Unicaja. El Barça juega muy bien. Una final en al BCL Tenerife-Unicaja sería muy factible. Se ha contagiado a la gente de cerca. El trabajo es muy bueno en los despachos y si este año no se puede, el siguiente llegará", pronosticaba Plaza.

"Es muy difícil ganarle, vamos a ver qué pasa en la Copa. Hay mucha ilusión y esperanza en la Champions, es un buen momento para pelear por un título", aseguraba Cabezas.

Carlos Cabezas, Joan Plaza y Berni Rodríguez. Carlos Cabezas, Joan Plaza y Berni Rodríguez.

Carlos Cabezas, Joan Plaza y Berni Rodríguez. / Javier Albiñana

"Voy a venir al partido contra el Baskonia el domingo. Hay una gran diferencia ente Liga regular y Final Four, por eso hay equipos grandes que pierden y nunca están, pero la Copa es una competición que cualquiera puede ganar. En diferentes países, Italia o Serbia, ha ganado un equipo de Segunda División. Un partido a un día nunca se sabe. Es difícil porque el Madrid tiene un equipazo, Barça también, es posible. Si gane o si pierde me gusta este club siempre porque busco el resultado del Unicaja. Hay que apoyar a este club. Hay que esperar los título, hay colas, pero debes trabajar duro y con confianza. Si gana, mejor, pero soy aficionado igual", cerraba Maljkovic.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios