Jonathan Barreiro: "A veces hay que pararse, mirar al techo del Carpena y decir 'joder'..."

Jonathan Barreiro Rodríguez (Cerceda, 1997) afronta su quinta temporada en el Unicaja, siendo el segundo jugador con más longevidad en el equipo, solo por detrás de Alberto Díaz. Experto en pasar desapercibido, su papel dentro del grupo es enormemente valorado por el club y técnicos, gracias a ese trabajo oscuro, constante y guerrero que lo define, y que ha ido puliendo a lo largo de estas temporadas. Barreiro transmite ese perfil de yerno ideal, con buena planta y serenidad, mientras se sienta con Málaga Hoy para analizar la actualidad del conjunto malagueño. Y lo que surja.

Pregunta.¿Qué tal esas primeras sensaciones de la temporada? Han pasado muchas cosas desde septiembre: Singapur, Supercopa, lesiones…

Respuesta.Ha estado bien. Se está viendo que el equipo va alcanzando ese punto que queríamos, encontrando esa solidez, el feeling entre nosotros, sabiendo que todo es parte de un proceso. Y a base de mucho trabajo estamos consiguiendo pequeños objetivos, que quizás no hacen tanto ruido y va más entre nosotros. Queda mucho todavía, pero se ve que el equipo está dando pasos adelante.

P.Nos comentó Ibon hace varias semanas que la mitad de la libreta de jugadas es nueva.

R.(Ríe). Ibon también comentó alguna vez que muchas veces te tienes que adaptar a los jugadores que tienes en el equipo, con lo cual no es lo mismo los que teníamos el año pasado, que te daban X cosas, a los que tienes esta temporada, que te dan otras. Era necesario cambiar el playbook, aunque sí es verdad que mantenemos ciertas cosas, y sobre todo lo que todavía está ahí, sí o sí, es el espíritu de tener ambición. Eso no puede cambiar año tras año; la pizarra sí porque los equipos te conocen, saben cómo juegas, y si haces lo mismo pues entras en ese estancamiento. Hay que estar reinventándose constantemente.

P.Ese gen competitivo lo personifica el núcleo duro de estas temporadas, en el que se encuentra. ¿Tirando ahora más del resto?

R.Claro, y es algo que tiene que estar. Lo que hemos conseguido estos años es a base de ese núcleo que teníamos. La idea es mantener mucha ética de trabajo, compromiso… Todos los jugadores sabemos qué significa estar en el Unicaja, los años también malos que hemos vivido. Queremos que la ciudad continúe estando orgullosa de su equipo, que se mantenga la alegría en el Carpena, esto es lo más importante para los jugadores: ver a la gente disfrutar y el cómo te apoya. Luchamos por eso, e intentaremos seguir llevando al club lo más lejos posible y que la gente esté contenta por venir a ver a su equipo.

P.¿Le da uno mayor valor a lo que se ha conseguido en estas tres temporadas? Ahora que se han marchado jugadores importantes.

R.Por eso lo importante es disfrutar de cada momento y cada título. Siempre lo decimos entre nosotros. Cuánta razón. No es nada fácil (repite), y a veces vivimos en una burbuja que no paramos de ganar y a veces hay que pensar ‘oye, esto no es normal, vamos a disfrutarlo más’. Muchas veces cuando ganas, quieres más y más, pero a veces te olvidas de disfrutar porque es la ambición que tenemos jugadores. A veces ganas un título y ya piensas en el siguiente, no en disfrutarlo. A veces hay que pensarlo, mirarnos a la cara, y decir ‘joder’. Miras esto (señala el techo del Carpena) y ves todo lo que hemos hecho…

P.Le tocó comerse años oscuros.

R.Exactamente. Y ahora ves esto (empieza a enumerar todos los títulos de este ciclo señalando arriba). Una auténtica barbaridad. Cuando yo llegué apenas había banderas. Y queremos volver a vivir eso. No es nada fácil, casi imposible que vuelva a repetirse, pero sabemos dónde estamos y la ambición está ahí. A este equipo luchar ante los rivales más potentes. Vamos a estar ahí. Lo importante es que tenemos a la gente encima, con el Carpena lleno. Antes no teníamos esa unión con la afición, es algo que he vivido aquí. Lo que más aprecio de estos años es la unión entre todos, algo muy complicado de conseguir y por eso lo hemos conseguido.

P.Quizá tengamos todos que prepararnos a perder más que en estos años.

R.Cuando me has dicho esto, me he acordado de una cosa que pensaba hace poco: los mejores años que ha vivido el club, veníamos de un año muy malo. Se trata de aprender. Creo que el club, las personas que seguimos aquí, los jugadores… Todos hemos aprendido de años malos, coger esas experiencias y prepararnos para que venga un año bueno. Claro que es complicado estar siempre arriba, pero en las derrotas hay que mantenerse y estar todos unidos. No pasa nada por perder, sabiendo que los jugadores somos los primeros que queremos ganar siempre. Pero pierdes y aprendes el porqué. En este club siempre lo hemos hecho, y ahora pues puede que perdamos más partidos, pero que sirvan para volver a reinventarnos e intentar repetir los momentos de estas temporadas.

P.A lo tonto, quinta temporada en el Unicaja. ¿Siente el club como suyo?

R.Sí. Me siento muy unido a todos, sobre todo el cariño que me tiene la gente en Málaga, algo impresionante y que es mutuo. Siempre he intentado a lo largo de toda mi carrera dar el 100% en el sitio en el que estoy, lo siento como una recompensa que la gente me agradezca el trabajo. Y la lucha, algo que en Málaga gusta y el público malagueño valora mucho. Estoy muy agradecido a toda la gente que valora mi trabajo, que sabe cuál es mi trabajo en este equipo y lo entiende.

P.Hablemos precisamente de su rol. Trabajo sucio, oscuro, pasando desapercibido en pista. ¿Cómo ha sido esa búsqueda de su espacio durante estos años? Se ha buscado el rol a base de mucho curro. La primera parte que hizo el otro día ante Girona, por ejemplo.

R.(Piensa). Mira, todos los jugadores debemos crecer en torno a nuestro rol y fuera de él. Pero sin perder la vista a las necesidades del equipo. Eso es lo más importante, la ambición del jugador de no ser conforme es lo que le va ayudar a seguir creciendo. Lo más importante es el equipo, y creo que es algo que todos tenemos muy interiorizado. Lo importante es esto (vuelve a señalar al techo). Todos tenemos que entender que lo importante es el colectivo, que un día vas a estar bien, un día vas a jugar más, otro menos, un día aparecerá otro jugador… Aquí estamos por un nosotros y no por un yo. Y por mi parte, el tratar de crecer dentro de un rol, pero con ambición de querer mejorar y hacer más cosas, porque cuanto más mejores, vas a ser un jugador más completo y más vas a ayudar al equipo. Aunque no lo parezca, tengo esa tranquilidad cuando estoy en la pista, sé lo que tengo que hacer en cada momento. No tengo que demostrar a nadie, sino a mí mismo de mostrarme esa tranquilidad, porque vas a jugar mejor si estás tranquilo. Sigo trabajando en ello, pero he notado esa progresión en mí mismo con el paso de los años, quizá por la experiencia que uno tiene ya.

P.¿Es difícil mentalizarse, más en su caso que va siempre al 150%, que tiene que ponerse todos los días? Tener que pegarse un día con Sadiel Rojas, al siguiente con el guerrero del equipo contrario.

R.A mí me gusta picar piedra y currar. Cuando salto a la pista, me olvido de todo y solo pienso en ganar. Al final como jugador tienes que leer también el partido, lo que toca; si el partido un día necesita que tu rol sea más defensivo por las características del equipo contrario; si tienes que rebotear más. Tengo muy claro que mi rol es siempre dar el 100%, sea el partido que sea, da igual. Es lo que me pide Ibon y es que se lo tengo que dar. Si no lo hago, no estoy en pista. Es fácil.

P.¿Se siente cómodo haciendo ese trabajo? Esas tres-cuatro cosas que borda: intensidad, rebote, suelo competitivo…

R.Sí, porque son las cosas que veo que puedo aportar a este equipo. Diría que eso que dices son mis bases, donde tengo que dar el 100% en ellas. Pero luego ir creciendo más en otras cosas para lograr ser el jugador más completo. El nivel de la ACB no deja de subir, con lo cual no es bueno que te estanques solo en tres-cuatro cosas, sino que las tengas y que vayas creciendo en otras muchas.

P.En el tiro por ejemplo ha conseguido cierta seguridad (40% la pasada temporada con casi dos intentos). Habitual verle meter esos tiros, sobre todo los de 45 grados.

R.Sí. Esto del tiro va por rachas. Ahora estoy metiendo más de dos que de tres. No soy un tirador, pero sé que esto son rachas, y ahora mismo estoy en un momento de tener mucha confianza, porque me lo he ganado a base de trabajar y porque me la dan, tanto los compañeros como Ibon, que me da esa confianza cuando salgo a la pista y me permite hacer esos tiros sin miedo al fallo, con lo cual como jugador lo agradeces y te permite estar más cómodo en pista.

P.Con la reconstrucción del equipo e incluso reestructuración de roles de jugadores que ya estaban. ¿Qué le pide Ibon?

R.Lo mismo de estos años. Sobre todo lo que me pide son cosas innegociables y que no repercute en si un día estás acertado o no lo estás, que eso al final es lo bueno también. Dar ese plus de energía al equipo, ayudar a mis compañeros en defensa, rebote, asumir tiros que tenga liberados. Y en esos tiros, porque sé que los voy a tener, no pensar mucho, porque en el baloncesto hay que ejecutar rápido. Cosas sencillas. Insisto que esa es mi base.

P.Hablemos de los fichajes. Se han ido jugadores importantes, de mucho talento. ¿Qué se gana con los que han llegado?

R.Aire fresco, eso para empezar. Los jugadores están aportando, pero van a sumar mucho más al equipo. Es cierto que necesitan un proceso porque hay algunos que no han jugado en ACB, una competición que es muy dura y que requiere esa adaptación. Los nuevos están trabajando mucho para que su adaptación sea más rápida, muy involucrados con el equipo. Estoy seguro que los nuevos nos dan muchas alegrías porque entreno con ellos todos los días; habrá alguno que tarde más, pero esto es un proceso. Son muy buenos fichajes.

P.A Castañeda parece que lo han apadrinado, muy encima de él para que despegue. Ibon decía que necesitaba un sacacorchos para que se expresara.

R.A Xavier hay que conocerlo. Es un chaval increíble. Y cuando entrenamos, siempre llega de los primeros, se pone a hacer sus tiros, va mucho al gimnasio. Es un currante. Y cuando una persona es trabajadora, tiene que estar tranquilo porque está haciendo su trabajo. El momento le va a llegar. No sabemos cuándo, pero si sigue en esa línea, le va a llegar. Todos le vemos en cada entrenamiento. Y si llega el partido, hace un buen tiro y falla, pues ‘oye, no pasa nada, tira el siguiente’. Nadie te va a decir nada porque falles un tiro, sobre todo porque le vemos que en los entrenamientos y las mete. Hay que animarle. Hace muchas cosas bien: nos da mucha visión, pasa muy bien el balón… A nosotros nos gusta jugar con él porque tiene esa inteligencia para jugar y nos encuentra. Es un proceso, lo está trabajando.

P.¿Y Chris Duarte? Se han generado unas expectativas importantes y él se va quitando poco a poco presión. La actitud la tiene.

R.Lo has dicho muy bien. Esto último. Es la actitud que tiene. Un jugador muy trabajador y ambicioso, con lo cual siempre quiere ayudar más al equipo. Está trabajando en ello. Lo veo poco a poco más tranquilo y se va sintiendo poco a poco más cómodo, dentro de ese proceso de adaptación al equipo, el rol que le pide el entrenador y que va entendiendo cada vez mejor porque está poniendo mucho de su parte. Y su momento va a llegar, está claro porque tiene destellos de mucha calidad en los partidos.

P.¿Es tan bueno? ¿Se nota que es un jugador superior cuando entrenas con él?

R.Claro. Le ves cosas de mucha calidad. En el partido le irán saliendo. Es un tío muy trabajador. Más pronto que tarde, veremos su mejor nivel.

P.¿Y en el grupo ha encajado bien? Viene de una cultura muy diferente.

R.Esto sale mucho en las entrevistas que le hacéis a Juanma y a Ibon. Que lo de la pista está muy bien, pero igual o más importante es la persona, ese scouting que vosotros decís es muy importante. Es una persona igual que todos. Tiene ese aura de estrella, algo que es normal; eso se te crea porque viene de jugar NBA y por todas las expectativas que se han generado.

P.¿Se ha asimilado ya el golpe de Kravish? Con la mejor cara en el hospital y el otro día en el banquillo.

R.Es lo más admirable que tiene David, que tiene que ser el más fastidiado y luego llega con una sonrisa al vestuario, hace bromas con nosotros. Me parece admirable que tenga esa capacidad, y eso al final lo transmite en el grupo. Por eso es tan complicada, en parte, su ausencia. Es una pérdida… Muy complicado sustituir a David porque es un jugador que te abre el campo, tira de tres, con un tacto increíble cerca del aro. Una pérdida que vamos a notar mucho.

P.Nos decía Ibon que no hay jugadores como él a la hora de buscar pívot.

R.Es complicado. Viendo a todos los equipos de la ACB, dime un jugador que se parezca a David, que tenga esa fiabilidad en el short roll y que apenas falle de dos, que pueda tirar de tres, los ganchos que hace. El fichaje de David fue en su momento un acierto increíble, con lo cual un jugador como él… Pero seguro que el club fichará un jugador con otras cualidades y que nos pueda aportar en cosas diferentes. Nos puede venir bien incluso.

P.Empezó a jugar al baloncesto a los 12 años. Muy tarde.

R.Más o menos. Hacía fútbol y natación, pero una vez que empecé con el baloncesto ya estaba todo el día con la pelotita en el mano, las 24 horas del día. Sí que empecé tarde, pero entrenaba mucho. Empecé en Carballo (La Coruña), luego en Sant-Yago, y ya no dejaba la pelota. Tuve que echarle muchas horas y ahí es cuando te llega la mejoría. El baloncesto para mí era un hobby que me encantaba, rápidamente teniendo esa necesidad de jugar.

P.Era un jugador de gran proyección en categorías inferiores. Le llegaron a denominar el Magic Gallego. Ahora con la confesión de Ricky Rubio y los riesgos de generar una presión máxima a un adolescente. ¿Cómo gestionó todo eso, llegó a afectarle?

R.Tranquilidad. Soy una persona calmada y supe mantenerme al margen de todo eso. Te ayuda a madurar. Lo he vivido con tranquilidad gracias a mi entorno, que nunca me ha generado expectativas a mi alrededor, sino mantener los pies en el suelo, y por eso lo viví con tanta naturalidad y sin darle más importancia de la que tiene porque al final mi techo lo iba a marcar yo a base de mi trabajo.

P.Hábleme de sus tres años (2012-2015) en el Real Madrid (fue campeón de Euroliga júnior en 2015 junto a Luka Doncic o Santi Yusta).

R.Muy bonitos. Conseguimos hacer un equipo increíble, incluso recuerdo que hubo un año que no perdimos ningún partido y que ganamos dos campeonatos, con Paco Redondo de entrenador. Y con esos jugadores tan extraordinarios, especialmente Luka, y otros que están en ACB. Una etapa muy bonita en la que crecí mucho como jugador, el saber lo que supone vestir una camiseta como la del Real Madrid y su responsabilidad, algo que te inculcan da igual la edad que tengas. Tú sabes que estas en el Madrid y que tienes que luchar por todos los títulos, no es que el Madrid te lo diga, sino que tú lo ves. Sientes que estás vistiendo una camiseta importante. Con 17 años ya lo sabes.

P.Extrapolable a su rol en el Unicaja, se ha tenido que currar mucho el camino para llegar hasta aquí.

R.Pues sí. Tuve que salir del Real Madrid y volver a Galicia, a Ourense y jugar una temporada (15/16) en LEB Oro. Pero mi sueño era jugar en ACB y llegó esa oportunidad de Zaragoza, que para mí fue el salto definitivo, aunque lo pasé mal en el primer año porque no jugaba mucho. En el segundo año llegó Jota Cuspinera y me dio esa oportunidad en el equipo, y con él tuve los primeros pasos en ACB, con un entrenador espectacular. Y poco a poco intentar hacerte tu hueco, saber qué tienes que hacer para jugar, ser inteligente. Y muchas horas en el pabellón y el gimnasio.

P.Tiene contrato con el Unicaja hasta el 2027, más otra adicional. Ahora que el jugador cupo está preciado, un valor escaso. ¿Está ese cosquilleo de jugar Euroliga algún día o le gustaría seguir echando raíces en Málaga?

R.Entiendo que muchos jugadores tengan el objetivo de jugar Euroliga, aunque depende de qué valoren los jugadores. Tyson Pérez por ejemplo pudo valoró la estabilidad, el proyecto o la ciudad para seguir aquí, o que el club te valora. No es un paso sencillo y al final el jugador tiene muchas cosas encima de la mesa. Y por mi parte, el jugador tiene que estar en el sitio donde se sienta valorado, que vea que pueda crecer dentro de rol. En Málaga estoy súper contento, muy cómodo. De momento se está cumpliendo todo eso que te digo, siento además ese cariño de la gente, que como te decía es muy importante. No sé ni qué voy a cenar esta noche.

P.Y será importante que se hable mucho gallego, tiene a Tyson Pérez y Fran Vázquez. Y el acento no se le va.

R.Parece que sí, pero está ahí (ríe). Tengo dos dominicanos y escucho más dominicano que gallego. No sé si enfadarme con ellos… Con Tyson hablo en castellano, sí que hay alguna palabra que me sale en gallego, pero él si tiene un acento más marcado que yo. Luego saca el dominicano con Chris y se genera un popurrí de acentos y términos que me hace mucha gracia.

P.Volver a la selección, ahora que se hable un ciclo con un nuevo seleccionador. ¿Piensa en ello?

R.Me centro en mi curro en Málaga. Eso siempre lo he visto como una recompensa, de estar ahí, las opciones que tengas de ir a las ventanas o a un Eurobasket. Ya se verá. He tenido la suerte de ir a las Ventanas, a veces he jugado, otras veces no. Siempre he sacado la parte positiva de ir, de poder ayudar y crecer como jugador, también en lo mental.

P.Por último. ¿Con qué estaría contento Jonathan Barreiro esta temporada? Quizá estemos midiendo todavía el techo del equipo.

R.Ganar en Andorra y luego en Champions (ríe). O ganar en Zaragoza después, que llevamos unos años sin ganar y es una pista complicada. Y sobre objetivos, somos el Unicaja y hay que pelear por todo, estar ahí, pero sobre todo pelear. Intentar estar arriba luchando con los grandes. Que intentaremos luchar por títulos, por supuesto, pero otra cosa es conseguirlo. Vamos a dar mucha guerra.