Karditsa-Unicaja: Por la Grecia profunda (19:00)
Segundo partido de la Basketball Champions League en Karditsa, en el centro de la Grecia peninsular, un rival que vive el partido como una fiesta en la primera participación de su historia en Europa
Una visita que es un acontecimiento
La primera fase de la BCL no es un prodigio de nivel baloncestístico pero sirve para aprender geografía. En la Grecia profunda, a tres horas de Atenas, casi equidistante con Salónica, está Karditsa, sede del ASK, el rival del Unicaja (19:00 horas) en la segunda jornada de la fase de grupos de la competición europea. Es la primera participación continental del club griego, a cuya pista da nombre el deportista más famoso de la localidad, el ex pívot Giannis Bourousis. Hay fiesta en el corazón del país con la visita del Unicaja, que no deja de tener el prestigio de muchos años en la Euroliga y sus dos títulos de BCL recientes.
Allí se desplazó el Unicaja tras un largo lunes, con entrenamiento por la mañana en el Carpena, viaje hasta Barcelona, enlance hasta Atenas y posterior viaje por carretera de tres horas hasta Karditsa. Son las particularidades de la BCL, que da cabida a proyectos más modestos, gracias al quinto puesto obtenido la temporada anterior, el mejor de la historia del club. Después de ascender en 2022, con Bourousis sobre la pista en su último acto de servicio, se ha mantenido tres temporadas y su rendimiento ha sido creciente. Nikos Papanikolopoulos, exterior de larga carrera como jugador, en la que pisó la Euroliga con el Olympiacos, es el técnico desde enero de 2023 y con él ha ido creciendo un proyecto como hay ahora en el país heleno, ya se vio con el Lavrio. Apuesta por jugadores americanos más el core local habitual. Será el undécimo equipo heleno al que se enfrente en su historia el Unicaja tras AEK, Aris, Iraklis, Lavrio, Maroussi, Olympiacos, Panathinaikos, PAOK de Salónica, Peristeri y Promitheas Patras.
El Karditsa sorprendió en la primera jornada venciendo en la pista de un clásico de la competición, habitual rival del Unicaja, el Oostende. Lo hizo en la prórroga y sabiendo sufrir. Cuenta con ese fuego especial de la primera vez, que retroalimenta a público y equipo. Se transmite esa sensación de estar disfrutando de una experiencia brutal para una zona modesta del país en el que sólo un equipo de fútbol femenino había llegado a la máxima categoría griega. Ahora es el primer partido oficial europeo para el rival del Unicaja, así que en motivación e ilusión es imposible vencer. Es cierto que la diferencia baloncestística debería ser enorme. Pero el Unicaja debe poner esos mínimos competitivos de agresividad e intensidad sobre la pista para ganar. Ya se saba que amarrar en casa y ganar fuera algún partido con buenos averages da opciones altas de evitar el play in, aunque el estatus malagueño ha traspasado ese nivel hasta ser el dominador de la competición. A través de Courtside1891, la plataforma de la FIBApara ofrecer su producto, se podrá ver la curiosa experiencia en el Giannis Bourousis Hall del Unicaja, equipo a batir de la competición que en estos año la ha respetado al máximo sin dejarse apenas victorias en cualquier rincón del continente.
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