Dio su palabra y, de momento, la está cumpliendo a rajatabla. Antonio Jesús López Nieto ha acompañado al Unicaja en todos los viajes de esta temporada. Primero a Tenerife y luego a Murcia en la ACB y ahora ha tocado Novgorod en la Basketball Champions League. Hay que tener en cuenta que es uno de los desplazamientos de más complejidad de todo el curso, con salida el domingo y llegada el jueves por la noche a Málaga. Pero el deseo del presidente era vivir el estreno del club de Los Guindos en esta nueva competición, donde él tuvo peso para que se tomara esta decisión. No hay que obviar que es un momento histórico. 

Junto a él también formó parte de la expedición Juanma Rodríguez, también habitual en las salidas del equipo malagueño desde su regreso. Ambos quieren vivir el día a día del conjunto cajista y los partidos fuera de casa no son una excepción. Durante la campaña podrán surgir más compromisos, pero hasta la fecha han hecho pleno. Es una buena manera de hacerse sentir para dos personas ahora primordiales en el funcionamiento del Unicaja, del que varios jugadores han hablado muy bien públicamente. Esta cercanía, sin duda, ayuda a todas las partes. También es un gesto que denota compromiso.