Las raíces del Unicaja en la Euroliga
Nueve ex jugadores, cinco de ellos que participaron en este ciclo glorioso, más un entrenador que fueron parte de la familia cajista, en el arranque de la competición más importante del continente
Dani Carrasco, maestro de ceremonias
Antes que la ACB, por 'culpa' del Unicaja con su título en la BCL y su participación en la Copa Intercontinental, empieza la Euroliga. Territorio en el que el club malagueño se desenvolvió de manera ininterrumpida entre 2001 y 2016 más un año extra, ya en el nuevo formato, 2017/18. La mejor competición del continente, pero ahora inaccesible, así lo ha verbalizado repetidamente el presidente cajista, desde el punto de vista económico y logístico para mantener la competitividad que se demanda. El paso atrás a la esfera FIBA fue criticado en su momento, en el verano de 2021, pero la realidad ha dado la razón a ese movimiento ejecutado por Antonio Jesús López Nieto.
No impide al aficionado al baloncesto local disfrutar de ella, este año con un punto más de nostalgia quizá por el alto número de recientes jugadores de este ciclo glorioso que forman parte de ella, al calor de su revalorización en su etapa en Málaga. Un círculo virtuoso en el que el Unicaja ha desarrollado jugadores por encima de su estatus actual. Es lo que ha permitido ganar siete títulos en dos años y medio. Asumir esa posición en el estrato del baloncesto continental permite atraer a jugadores que buscan impulsar sus carreras y ven en Málaga un lugar ideal para hacerlo. En la plantilla actual hay varios ejemplos.
Comienza la Euroliga y en ella habrá nueve ex jugadores del Unicaja, cinco de ellos de pasado reciente, más un entrenador, Sergio Scariolo, que se marchó en 2008 de Málaga pero que ha mantenido el vínculo con la tierra hasta el punto de ser hijo predilecto y de mantener su ancla vital en Marbella. Ahora vuelve para dirigir al Real Madrid, sempiterno aspirante.
Sólo hay dos jugadores que participaron con el Unicaja en la Euroliga, Nemanja Nedovic y Edwin Jackson. El serbio, a sus 34 años, cambia el equipo de su vida, el Estrella Roja, por el Mónaco, consolidado como equipo de play off, ahora con Spanoulis a los mandos y que se ha reforzado con jugadores de calidad, como Mirotic, además de mantener un bloque pétreo. Estuvo tres años en Málaga Nedovic y fue parte de esa última plantilla que jugó la Euroliga en formato Liga a las órdenes de Joan Plaza tras conquistar la Eurocup. Uno de los jugadores más plásticos y estéticos que pasó por Málaga y que dejó gran huella.
No estuvo tanto tiempo en el equipo Jackson, sólo una temporada (2015/16), pero su vínculo con la Costa del Sol permaneció. Forma parte del Asvel francés, donde su buen amigo Tony Parker está a los mandos. Jackson jugó la temporada previa a que la Euroliga quitara la licencia al club malagueño. El alero francés conservó vivienda en Alhaurín de la Torre, viene con regularidad y, de hecho, su pareja es malagueñan. Con 36 años, ejerce un papel de veterano curtido para misiones concretas en equipo francés.
Pasada ya esa época estuvieron otros dos jugadores de esta lista: Mathias Lessort y Aleksa Avramovic. Fue en la época de Luis Casimiro como entrenador, ya en esfera Eurocup. Avramovic duró pocos meses en Málaga, no se optimizó su rendimiento y la adaptación no fue ideal. Su carrera después explotó a las órdenes de Obradovic en el Partizan y ahora es un jugador de nivel titular en la Euroliga. Tras un año en el CSKA Moscú (fuera de competiciones europeas) ahora ficha por el Dubai, equipo de nueva implantación, con dinero y con matriz muy balcánica en su roster y su gestión. Lessort, que formaba pareja interior con Shermadini en un equipo que quedó eliminado de cuartos de final de Copa, Liga y Eurocup (en los dos últimos casos tras robar factor cancha), también creció mucho tras su salida de Málaga para ser contendiente a MVP y habitual en los quintetos de la Euroliga. Tras una grave lesión, ahora regresa para fortalecer el juego interior del Panathinaikos.
Y los jugadores del ciclo actual. El primero en salir fue Darío Brizuela, en el verano de 2023, después del título de Copa. Renovó en abril por varios años y en junio el Barcelona pagó su cláusula de rescisión (más de un millón de euros) para marcharse al nivel superior. En la Ciudad Condal ha demostrado ser un jugador legítimo de la competición, con tramos de mucho impacto y un crecimiento integral. No todos lo pronosticaban al marcharse. Próximo a cumplir 31 años, está en su madurez como jugador.
Y la gran marcha de este verano, algunas esperadas (de hecho, hasta el propio club lo daba por perdido algún verano antes) y otra no. Tyson Carter y Dylan Osetkowski coincidirán en Belgrado, pero en trincheras distintas en uno de los derbis más calientes, seguramente el que más, del continente. Osetkowski estará a las órdenes del señor de la Euroliga, Zeljko Obradovic, en un equipo de composición algo caótica, que ha firmado a Muurinen, gran sensación joven del Eurobásket con Finlandia, pero que aún sigue en el mercado buscando más refuerzos. Carter está en un Estrella Roja sobrepoblado y con perfiles repetidos en el juego exterior, aunque con la lesión grave de Canaan puede aumentar su peso. Los dos habían catado antes la Euroliga, en San Petersburgo y Lyon, pero ahora llegan con el estatus, la madurez y solvencia que han adquirido en Málaga.
Por último, la pareja que se fue a Valencia en la última semana de junio, Kameron Taylor y Yankuba Sima, que dejaron más de un millón de euros en Los Guindos. Se ha podido ver este fin de semana, otra vez, la dimensión de jugador del alero de Maryland, que también había jugado la máxima competición con el Maccabi, pero no cuajó de primeras. Tras un rodeo, con dos años sensacionales en Málaga tras relevar a Darío Brizuela, llega consolidado como un jugador tremendo, en madurez, influyente en las dos canastas y con galones de primeras en su nuevo equipo. También creció mucho Sima en el Carpena, ayudó en los seis títulos anteriores. Había pegado un salto previo en Manresa importante con Pedro Martínez, que también le ha reclutado para este ambicioso proyecto que ya ganó la Supercopa.
Es el grupo de ex jugadores y ex entrenador del Unicaja en la mejor competición del continente. Hace siete años que el equipo malagueño no compite en ella, pero esta temporada, con aumento a 20 equipos, habrá un motivo más para disfrutarla con jugadores bastante queridos.
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