La ruleta de Dylan Osetkowski

Entre rumores sobre su futuro y sobre una sanción que no llega, el californiano dio un paso adelante y creció en las últimas semanas

La FIBA y la fuga de talento

Dylan Osetkowski, en un posado.
Dylan Osetkowski, en un posado. / BCL

Periódicamente, el nombre de Dylan Osetkowski rebrota a la palestra y a los titulares. Tiene magnestismo, es un jugador soberbio y el cansino tema no resuelto de su sanción por un supuesto positivo en eterno estudio se une a su situación contractual, con una simbólica cláusula para romper el vínculo con el Unicaja y salir al mercado. Desde Alemania y Serbia se informaba en las últimas horas de un acuerdo para firmar por un año con otro opcional con el Partizan de Belgrado de Zeljko Obradovic.

Las fuentes consultadas no dan por cerrado ningún acuerdo. Es una posibilidad que acabe en la Euroliga, es el deseo del jugador, que en breve cumplirá 29 años y que pretende firmar un contrato óptimo en la madurez de su juego. La opción asiática con un contrato elevado también seduce al jugador. Está la nube negra de esa posible sanción, sobre la que se ha hablado y escrito tanto que se cae en la reiteración. Lo cierto es que cercano a cumplirse el año de la comunicación del positivo (la muestra es de diciembre de 2023), con situaciones rocambolescas como que la notificación desde el organismo responsable no fuera mandada al lugar correcto en la sede del club, Dylan Osetkowski sigue jugando y siendo una pieza muy importante para Ibon Navarro. Pocos jugadores con su versatilidad en el panorama continental, ha jugado este año desde el tres al cinco.

El Unicaja, en este proceso de la sanción, intentó renovar al jugador, pero su respuesta y la de su agente es que prefería tomar otro camino. Ya fue el verano anterior. De hecho, esa sanción hasta ahora fantasma ha sido el motivo por el que Osetkowski ha seguido jugando en Málaga, la idea era dar el salto a la Euroliga, sonó para varios equipos y se llegó a dar como muy cercano su pase al Barcelona, pero todo quedó paralizado.

No se ha visto con continuidad al mejor Osetkowski esta campaña, en algún momento ha dado la impresión de que no estaba del todo a gusto, que le sobraba esta temporada en Málaga. No es fácil procesar mentalmente el callejón sin salida con una guadaña al final, no se sabe el daño, que está esperando. Ha intervenido directamente en los cuatro títulos, con el MVP en la Intercontinental, con 51 partidos y más de 1.000 minutos acumulados entre todas las competiciones. En las últimas semanas se le ha visto más sonriente, en Atenas lanzó una arenga en un tiempo muerto que gustó y no ha dejado de estar comprometido con sus lagunas mentales. ¿Se podrá disfrutar hasta el final de la temporada? Es el deseo de todos, lo que ocurra a partir del verano está ya en medio de una ruleta.

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