Tyson Carter: "Agradezco el cariño y el apoyo, Unicaja"

El Unicaja tuvo un recuerdo con Tyson Carter. El club mandaba fuerza al de Misisipi, recuperándose de una embolia pulmonar, con una camiseta que lucían los jugadores en el calentamiento con su rostro y el mensaje "mucha fuerza" y en su versión en inglés "stay strong". Hubo ovación del Carpena para darle ánimos al que fue jugador de la entidad de la Costa del Sol hasta hace apenas unos meses antes del partido ante el Barcelona.

El contacto con Carter y su entorno ha sido constante desde que a principios de la semana pasada se conociera el episodio, después de que sintiera indispuesto después del viaje en el que el Estrella Roja, su actual equipo, ganara en la pista del Fenerbahce. Fue hospitalizado y se le diagnosticó un problema de salud serio. El club le mandó un ramo de flores con un mensaje firmado por el presidente, Antonio Jesús López Nieto. Y también el grupo, como relató Ibon Navarro, le realizó una videollamada para dialogar con él.

A través de las redes sociales, Tyson Carter respondía con un mensaje: "Aprecio el cariño y el apoyo, Unicaja", acompañado de corazones verdes y morados. No son momentos sencillos para Carter. Había comenzado bastante bien su regreso a la Euroliga, con la que ya había jugado con el Zenit, tras sus tres años en Málaga, en los que creció mucho como jugador. El equipo había cambiado de entrenador y ahora es Sasa Obradovic quien dirige después de la destitución de Sfairopoulos. El exterior de Mississippi promedia 27 minutos en pista, con 14.7 puntos (50% en tiros de dos y 40% en triples), 2.3 asistencias y 2.7 rebotes en los tres partidos de arranque, con dos derrotas al principio y una victoria en la última semana en la pista del Fenerbahce, vigente campeón en sus partidos. Con protagonismo y balón en ataque, Carter deseaba ese salto a sus 27 años para seguir creciendo en su carrera. Ahora, un receso por un problema de salud que se espera que no sea grave. Desde Málaga se le manda fuerza a uno de los mejores escoltas que pasó por Málaga, donde dejó su huella.