Unicaja: Conjura en Gibralfaro antes de la Copa

Es semana de Copa del Rey, la semana más especial del año. El Unicaja descansó este lunes después de que el domingo hubiera una sesión especial lejos del Carpena. El equipo viajó desde Lugo con la derrota a cuestas el domingo, masticando una decepción que a nadie gusta. La fiesta que había en el Pazo denota que ganarle al Unicaja es algo que se celebra. Y es un elogio al estatus que ha recuperado el club en estos últimos años. Las derrotas duelen. Sólo se han perdido cinco de 34 partidos oficiales desde que comenzó la temporada septiembre, todos en ACB, donde se firma un 75% de triunfos.

La plantilla de jugadores y el staff tuvieron este domingo una actividad de coaching, práctica habitual con Ibon desde que aterrizó, varias veces durante la temporada. Estaba ya prevista, no fue por la derrota en Lugo. Una manera de destensar y limpiar la cabeza. Se desarrolló en la zona de El Limonar y acabó en Gibralfaro, desde donde los jugadores distribuían a través de las redes sociales imágenes de la puesta de sol desde un lugar emblemático de la ciudad. Lo que hicieron y lo que hablaron queda entre ellos.

En palabras en El Mundo, Ibon Navarro recordaba que esa práctica ya se realizó antes de la Copa de Badalona. "Fue un fin de semana especial por muchas cosas. El problema de Darío Brizuela con su hijo [Bruno estaba en la UCI]. Todo el mundo le decía que se tenía que quedar en Málaga y él decidió ir. Se lesionaron Yankuba y Lima. Pero llegamos allí y disfrutamos mucho, un estado de flow en el que sale todo. Esa semana habíamos hecho una sesión de coaching que nos vino muy bien, nos liberó de la tensión competitiva y nos hizo ver la parte buena. Es probable que fuera el principio de todo lo que vino. Pero la gente dice que el Carpena empezó a llenarse después de esa Copa y no es verdad. Siento que la conexión con la afición ya había empezado un poco antes. Por lo que el equipo transmitía a nivel de pelea, de jugar buen baloncesto", reflexionaba sobre ese punto de inflexión de la historia del club con ese mágico fin de semana en Badalona, donde no sólo se consiguió el título sino también ser el primer equipo que derrotó a Barcelona y Real Madrid en una fase final.

El técnico también trabaja lo extrabaloncestístico, suele referir que huir de la rutina es una de sus obsesiones, que no se caiga en una monotonía peligrosa. Ahora toca preparar el partido de este jueves ante un Joventut que ganó en la prórroga al Leyma Coruña y en el que el eterno Ante Tomic se alzó con el MVP de febrero. El equipo vuelve este martes a la actividad con un entrenamiento en el Carpena tras el que habrá un Media Day en el centro de Málaga con Barreiro, Alberto Díaz y Kendrick Perry. El miércoles hablará Ibon Navarro antes del entrenamiento. Tras él, comida en casa y a las 16:45 horas salida para Granada en bus. La combinación para volar directo desde Málaga llevaba a aterrizar en Las Palmas al filo de la medianoche y no era lo más recomendable para el descanso. Así que desde la capital nazarí se llegará antes de la cena al hotel del equipo.