El Unicaja se plantó en la final del torneo Adidas Next Generation, que organiza la Euroliga y se ha celebrado en Valencia, pero sucumbió ante el Herbalife Gran Canaria después de un partido en el que los insulares tomaron el mando antes del descanso para no soltarlo en todo el choque. El conjunto de Antonio Herrera arrancó bien, aunque se vio algo lastrado por las faltas personales de uno de sus jugadores más determinantes en esta cita valenciana: Nzosa que volvió a ser de los más determinantes en las dos canastas firmando 15 puntos, ocho rebotes y dos robos. El choque fue dominado en el capítulo anotador por los 30 puntos del jugador del Gran Canaria Jean Claudio Montero que además recogió seis rebotes y dio siete asistencias. 

Un triple del canterano de los malagueños Adrián Ramírez cerró el primer periodo del choque que los de Herrera pasaron adelante en el marcador (19-15). A partir de ahí, los canarios subieron enteros en defensa se apoyaron en los rebotes y la capacidad de Rubén López y en los puntos de Montero para reducir la ventaja y ponerse por encima en el electrónico 23-29. Pero un tiro libre de Pablo Sánchez y un triple de Javier Rodríguez evitaron que la diferencia creciese y se llegó al descanso con un 29-34.

En la reanudación, los insulares mantuvieron su dominio aunque los puntos de Tamba, Godspower o Rodríguez mantuvieron a los malacitanos con posibilidades en el enfrentamiento y el cuarto definitivo empezó con 52-59 en el electrónico. Pero el ritmo y la solidez del Gran Canaria acabó llevándose el gato al agua. Los puntos de Khalifa Diop en el último periodo arreglaron el trofeo para el Gran Canaria.

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