Quién es Wilmer Mejía, el 'Villano' que fichó el Unicaja

El Unicaja U22 consiguió la primera victoria de la temporada el pasado sábado ante el líder invicto, el Fundación CB Canarias, en esta novedosa competición. Se registró el debut de Wilmer Mejía, joven dominicano de 21 años que aterrizó el anterior domingo en Málaga. Su llegada estaba pactada desde el verano, pero no pudo ejecutarse antes por temas burocráticos. Impactó en sus primeros minutos, con 31 puntos (es cierto que con 25 tiros de campo) le dio algo distinto al equipo de Manolo Trujillo para conseguir la primera victoria. Descaro, desborde, verticalidad hacia el aro... También mucho campo de mejora defensiva. No es el plan que juegue 34 minutos por partidos, sino algo menos y más equilibrado entre los dos lados de la pista. Pero el talento está ahí e hizo mejores a sus compañeros, les dio aplomo y seguridad. Con 1.92 metros, tiene un chasis más explosivo que fuerte pero capaz de aguantar contactos en el contexto de la competición, en la que la gran mayoría de los jugadores son menores que él, que está en último año.

La creación de la nueva competición con cierta precipitación, ya a finales de la pasada temporada, tiene a los clubes aún un tanto desorientados aún de hacia dónde va a ir, de los propósitos más allá de desarrollar el talento joven que no tiene hueco en ACB, con el riesgo de poner, como advería López Nieto, a todos los jugadores juntos en el escaparate para que la NCAA pesque, teóricamente lo que se prentedía evitar. El Unicaja pescó para reforzar el equipo a nivel andaluz, como el jiennense Valero, clave en la victoria del sábado, o el esteponero Cazorla, también el internacional argentino Ian Torres, que pasaba de cadete a junior y su familia se trasladaba. Arturas Butajevas también llegó desde Barcelona para reforzar a esta generación. Convergen jugadores en el equipo desde 2004 como Mejía a Alonso de la Iglesia, aún cadete y de 2010.

En el caso de Mejía, más allá de elevar del nivel del equipo, se pretendía monitorizarlo, los jugadores dominicanos no ocupan plaza de extranjeros, son cotonou, y están ganando peso en el baloncesto europeo, también como alternativa al sueño de todos ellos, que es la NBA. Mejía es un jugador curtido, estuvo dos años becado en California formándose y en las anteriores temporadas jugó en una Liga de Desarrollo sub 22 que también se creó en la República Dominicana con el mismo objetivo que se lanzó en España.

"Wilmer es un chamaquito de un barrio que salió de Villa Consuelo, que trata de superarse, quiere ser alguien en la vida. Yo empecé a los 7 años. Un amigo de ahí que se llama Miguelín fue el que me puso en esto en verdad, me dijo que yo podía llegar, que yo podía vivir de esto", explicaba hace un par de meses en el podcast 3x5 en su país natal Mejía, que ha dominado la competición, en 2024 ganó la Liga U22 y fue MVP aunque este año fue eliminado antes con los Zorros: "Fue lo mejor que pudo hacer la Federación, esto ha cambiado mucho, ha logrado a muchos jugadores ponerlos en el mapa de verdad y mírame aquí, uno más que salió del sub 22 y me está dando más a conocer".

"Es un juego de ganar y perder, lo que hay es que divertirse", explicaba sobre cómo entiende el baloncesto Mejía, que salió del barrio de Bameso (Barrio de Mejoramiento Social), formador de numerosos jugadores de baloncesto y voleibol. Se le conoce en su país como el Villano y admira al internacional dominicano Víctor Liz y a Jayson Tatum en la NBA. "Ser grande, es la meta. Yo quiero ser grande, yo no tengo ningún límite ahora mismo, el límite mío no ha llegado yo sé que yo voy a dar más y voy a ser grande en esto", decía como propósito Wilmer Mejía antes de emprender esta aventura en España, en Málaga. Fue internacional sub 17 con su país en un Centrobasket y en el Unicaja quiere lanzar su carrera. Es posible que entrene con los mayores ahora en la ventana.