De sonrisa amplia y ojos grandes, Paula Valdivia es el puro reflejo de la ilusión que genera el deporte en jóvenes que aman lo que hacen. Ella destila esa fe por luchar por el balonmano con todo los sueños que le rodean. Aspiraciones que han ido apareciendo a medida que ha tachado de su lista otros, superando objetivos uno a uno. A sus 19 años, ya cumplió en las categorías inferiores de Andalucía y en cada llamada con la española. Su evolución ha sido notable y su permanencia en Clínicas Rincón era una obligación.

El conjunto malagueño comenzó algo tarde la pretemporada debido a los compromisos que tenían algunas de las jugadoras. "Hemos hecho un esfuerzo físico bastante grande, aunque Diego Carrasco y el cuerpo técnico han sabido dosificar los entrenamientos de menos a más y, claro, en tres semanas o cuatro ha tenido que programar toda la pretemporada pensando en la Liga. Es cierto que son pocas semanas para preparar el primer partido pero yo creo que estamos físicamente bien", dice Paula sobre las dificultades que han vivido antes de enfrentarse ante el CB Porriño el próximo sábado.

Con tan sólo una temporada en las filas del Costa, Valdivia ya habla como veterana. El club ha incorporado a varias extranjeras que pueden encontrar dificultades de adaptación, ella lo analiza así: "Este año ha habido más cambios que el pasado, hemos hecho bastantes fichajes. Eso, sumado a las que llegamos el año pasado y las que están de años anteriores, hacen un gran bloque. Las nuevas se han acoplado bien, al principio les costaba más debido al idioma y las diferentes costumbres. Este es un club que abre las puertas a todo el mundo con facilidad y hace que se puedan sentir como en casa".

Pese a su precocidad no le faltan sueños. Más allá de donde quiere llegar con su equipo, tiene retos personales: "El sueño de toda española es llegar a la absoluta. Es algo muy complicado que hay que trabajar muchísimo, siempre tenemos esa ilusión de llegar hasta allí". Y, para ello, ¿qué necesita? "Mucho trabajo físico, individual y sobre todo confiar en uno mismo día a día. Ser constante es lo más importante", dice la extremo del Clínicas Rincón, que espera aumentar su cifra goleadora. Todo dependerá de lo que pueda sacar de ella Diego Carrasco, su entrenador: "Llevo un año con él, este es el segundo. Es muy completo, se aprende mucho con él y quiero seguir haciéndolo mucho tiempo".

Este verano les tocó vivir una situación difícil. Un casi descenso sin merecerlo: "Fue un momento crítico. Nosotros acabábamos la temporada el año pasado creyendo que íbamos a seguir en lo más alto. Esta división tiene unos costes altísimos. Aunque necesitamos más patrocinadores aparte de Clínicas Rincón, que nos ayuda mucho pero necesitamos a otras empresas que nos apoyen para tener una plantilla buena y que siga progresando así".

Tras la consolidación, Paula busca un techo mayor a esa permanencia. El décimo puesto que cosecharon a final de temporada parece que en ésta se queda corto: "El año pasado teníamos un pensamiento más de novatas, de haber ascendido y de que teníamos que conseguir la permanencia. Ahora, teniendo en cuenta que es el segundo año, que han hecho muy buena plantilla y que tenemos calidad suficiente para seguir creciendo, no podemos quedarnos solo en la permanencia. El objetivo es seguir subiendo plazas, siempre se dice la permanencia, pero eso ya lo hicimos el año pasado".