Balonmano · División de Honor Femenina

Anatomía de una estrella

  • Jennifer Gutiérrez superó la pasada jornada los 100 goles en esta campaña, una media de seis por partido. Sus compañeras y entrenadores analizan las claves de su juego.

Cumplió el pasado mes 21 años de edad y, apenas unos días después, logró su gol número 103 en liga en los 17 encuentros que ha disputado con el Clínicas. Jennifer Gutiérrez acapara los elogios del mundo del balonmano al mismo tiempo que desespera a las defensas rivales. Capaz de tirar de su equipo cuando más lo necesita, Jennifer continúa creciendo en la búsqueda de un techo que únicamente ella puede conocer.

"Su límite está donde ella se marque, tiene todavía mucho margen de mejora. Da siempre el cien por cien en todo lo que hace y tiene capacidad para asumir todo lo que se le venga", comenta su actual entrenador Diego Carrasco. Éste ha sabido pulir a una jugadora que llegó a Málaga cuando era juvenil y que, poco a poco, se ha ganado un enorme peso en el club: "Desde que la vimos en cadete ya sabíamos que tenía algo especial. Ahora está dentro de la columna vertebral del equipo y en cualquier momento de los partidos asume la responsabilidad".

La algecireña parte siempre de salida desde el extremo izquierdo, su posición natural a pesar de que comenzó jugando como primera línea. Precisamente, Carrasco suele colocarla en el lateral derecho para desatascar el ataque malagueño, como ocurriera en el partido copero ante el Aula. "Pienso que podría trabajar con muchos más peso para aumentar su masa muscular. Si subiera cinco kilos más de masa sería imparable", detalla su compañera Estefi Méndez que, además de jugadora, es entrenadora personal. A pesar de los detalles físicos a mejorar, Jenni juega con una pasión que, en ocasiones, le juega malas pasadas: "Tiene mucha potencia y es pura garra, pero muchas veces debería controlar algo más su fuerza y velocidad. Sobre todo a la hora de lanzar, aunque tiene cualidades para controlarlo".

La imparable evolución de la jugadora de Algeciras hace pensar que, más pronto que tarde, pasará a estar en la plantilla de algún grande de España o de Europa. "Jenni madura continuamente. Como todas, mentalmente hay veces que está más fuerte que otras, pero en definitiva pienso que está bien preparada para todo", confirma Carrasco. Por supuesto, el sueño de ver a Jenni vistiendo la camiseta de la selección española absoluta está presente. Ya lo ha sido en categorías inferiores y, en un futuro próximo, se espera verla convertida en una nueva Guerrera. Su compañera de posición, Sole López, cree que "cumple todas las cualidades que debe tener una buena jugadora", por lo que "de aquí a poco tiempo debería estar convocada". López define a Jenni como "una jugadora de mucha garra, que pone intensidad en cada movimiento o en cada lanzamiento que hace", siendo así una jugadora "muy completa".

De Algeciras llegó también al Clínicas Rincón la extremo zurda Paula Valdivia. Ambas han compartido vestuario en Algeciras, Málaga y en diversas convocatorias con las selecciones nacionales y autonómicas. Mejor que nadie, Valdivia sabe de lo que es capaz su compañera y amiga: "Llevo muchos años con ella y demuestra en cada partido que es muy difícil defenderla". Para la algecireña, Jenni es "muy explosiva, muy rápida y sabe estar ahí en los momentos decisivos de los partidos". La costumbre de observarla golear desde cualquier zona de la pista invita a pensar que es capaz de adaptarse a cualquier posición. "Ha demostrado que puede jugar donde la pongan. Empezó en primera línea por su rapidez y ahora, a medida que va creciendo, va jugando cada vez más en el extremo de cara al futuro, pero rinde en cualquier posición"; dice Valdivia.

Jenni promedia seis tantos por encuentro en esta campaña, y está situada en la novena posición de la tabla de máximas goleadoras de la competición. La joven jugadora se codea en esta faceta con nombres ya contrastados como los de Laura Steinbach, Patricia Alonso o María Luján, pichichi de la liga con 115 goles. Y no sólo en la competición doméstica destaca una Jenni que fue clave en la remontada del Clínicas ante Aula Valladolid para conseguir el pase a la fase final de la Copa de Porriño. Jenni se fue hasta los nueve goles ese día, el de su cumpleaños, en el que también celebró con orgullo la consecución de una clasificación histórica para la entidad de la Costa del Sol.

La extremo es tan capaz de anotar con un tremendo salto desde su posición como de elevarse por encima de la defensa rival para marcar desde los nueve metros. Esa facilidad goleadora la convierte en una jugadora impredecible para las guardametas rivales. Sonora Solano sólo tiene que tenerla enfrente en los entrenamientos, pero ha tenido tiempo más que de sobra para lamentarse recogiendo el balón de las redes de Carranque. "Tiene un lanzamiento muy explosivo, además de un salto tremendo, puede definir como quiera y es muy difícil pillarla", detalla Sonora. Desde la distancia en la pista, la portera del Clínicas observa como Jenni "tiene el coraje en los momentos que hace falta y siempre acaba finalizando, de ahí que no sorprenda que lleve tantos goles esta temporada".

Mientras tanto, ella continúa centrada en culminar una temporada histórica con el Clínicas, un equipo del que tuvo ofertas para salir el pasado verano. Jenni creyó oportuno continuar en un equipo que crece paulatinamente en importancia en una Primera División de mucho nivel aunque, todo hace creer, que acabará saliendo para verla luchar por cotas más altas. Con la cabeza en su sitio, la algecireña sigue sorteando con naturalidad los halagos del mundo del balonmano. "Yo no sé los goles que llevo exactamente, lo sé porque me lo dice Alberto (jefe de prensa del equipo)", comentaba Jenni hace unas semanas en una sesión de entrenamiento. Esa naturalidad no se corresponde, ni mucho menos, con un enorme descaro en la pista que, de momento, la convierte en una estrella que se cuece a fuego lento.

Su primera entrenadora: "En muy poco tiempo lo hacía todo bien"

Anabel Gómez fue la entrenadora de Jenni cuando comenzó a dar sus primeros pasos en el balonmano. Fue en el Ciudad de Algeciras, equipo al que llegó "porque llega para estudiar en el Colegio Los Pinos, en el que se juega a balonmano". "Allí un profesor se lo dijo, comenzó a jugar y en ocho meses fue convocada por la Andaluza", añade Anabel, a la que le sorprendió más que nada que "en muy poco tiempo lo hacía todo bien. Tiene mucha coordinación y hacía las fintas muy rápidas, a pesar de no haber jugado nunca". Incluso, recuerda la entrenadora algecireña que "la ponía de portera y paraba más que la titular". Anabel señala que "era una chica muy bromista y cariñosa". De hecho, todavía "mantenemos el mismo grupo de aquellos tiempos". La preparadora cree que junto a Estefi Méndez "el año que viene puede salir a un equipo más potente. Le hacía falta curtirse un poquito y pienso que ya está preparada". Anabel suele asistir a varios de los partidos que juega el Clínicas en casa, como el que jugó en Copa ante Valladolid. De aquel día no olvida "el gol espectacular que marca de rosca desde el extremo en un momento muy importante". Por todo esto, la que fuera su primera entrenadora ve a Jenni "pronto en la absoluta, por lo que veo debería de ser convocada".

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