La empresa malagueña Hermanos Gallego ha decidido celebrar su primer cuarto de siglo de existencia con un avance en la comercialización de sus productos. La compañía, dedicada al sector agroalimentario, inaugura hoy una nueva fábrica que producirá frutas y verduras peladas, cortadas y listas para servir, algo insólito en la provincia de Málaga. La remodelación de sus instalaciones, ubicadas en el polígono industrial de Alhaurín de la Torre, para convertirlas en una fábrica de cuarta gama ha supuesto una inversión de más de 1,5 millones de euros y en ellas trabajará una veintena de personas. En total, se han incorporado 17 máquinas de última generación que han sido fabricadas a medida y que contienen una multitud de accesorios que amplían la versatilidad de las mismas con más de 30 funciones diferentes. De hecho, el montaje de toda esta infraestructura se ha extendido durante un año aproximadamente.

La nueva fábrica es el fruto de más de dos años de trabajo en los que se ha realizado una intensa labor de investigación y se han visitado varios países del mundo para conseguir el asesoramiento de importantes especialistas. Con este nuevo formato de venta de fruta y verdura, los responsables de la compañía esperan incluso revolucionar el sector de la hostelería y la restauración, al ofrecer una alternativa a aquellos empresarios que quieran aumentar sus beneficios. Además, su intención es apoyar al sector agrícola malagueño, ya que la política de la empresa se basa principalmente en la exportación de los mejores productos de la provincia al resto de la comunidad.

Esta nueva concepción en la distribución de frutas y verduras se presenta como una alternativa ideal para hoteles, restaurantes y hospitales, por su ahorro económico y de tiempo, ya que están listas para servir. Además, los productos se presentan en diferentes formas: en rodajas, ralladas, picadas o troceadas.

Por otra parte, las nuevas instalaciones industriales estarán dedicadas también a la elaboración de dos nuevos productos: el aceite de oliva virgen y el zumo de naranja cien por cien natural. El primero de ellos se obtiene de las aceitunas de los olivares de la localidad de Alameda, mientras que para el zumo las naranjas siguen un riguroso proceso de extracción con el fin de que conserven todas sus propiedades naturales y vitaminas beneficiosas para la salud del consumidor. La empresa familiar hermanos Gallego inició su andadura en los años 80 como agricultores de suministro para el Hospital Carlos Haya de la capital. Poco tiempo después, lograron montar su propia frutería en la barriada de Puerta Blanca. En 1989 se constituyeron en sociedad y en 1994 adquirieron una nave en Churriana con la que se convirtieron en distribuidores.

A partir de 2000, la empresa ha experimentado un crecimiento espectacular en su actividad, especialmente en 2002, cuando inauguraron unas instalaciones de más de 3.000 metros cuadrados en Alhaurín de la Torre. Esta compañía fue la primera en almacenar fruta y verdura en cámaras frigoríficas en Málaga y en utilizar camiones isotermos para repartir sus productos, según aseguran sus responsables.