Una operación conjunta, con participación de miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, agentes de Medio Ambiente y la Patrulla Verde de la Policía Local de Ronda, ha logrado localizar un importante alijo de veneno en una finca situada en el término municipal de Ronda, aunque posteriormente los equipos de los cuerpos de seguridad realizaron un segundo registro en otra finca situada en el término de Cartajima.

Los dos botes localizados contienen productos altamente tóxicos, aunque en uno de los casos se va a realizar un análisis en laboratorio para confirmar su identidad, aunque todo hace indicar que se trataría de estricnina, un veneno prohibido desde hace 30 años por su alta toxicidad y duración en el medio que infectaba. Precisamente, en la presencia de este veneno radica la importancia de esta operación, al tratarse ya de un producto muy raro de encontrar y muy peligroso. De hecho, las fuentes consultadas califican la incautación como una de las más importancias de Andalucía y posiblemente la más grande en la provincia.

En cuanto al segundo de los venenos, se trataría de aldicardb, un insecticida agrícola que suele tener esta otra función letal. En este caso, los investigadores han tenido que corroborar si existía algún tipo de permiso para su posesión o para el manejo del mismo, debido, precisamente, a esa posible aplicación agrícola.