La plantilla de la empresa Zardoya Otis -dedicada al mantenimiento y reparación de ascensores- inició el jueves pasado una huelga indefinida. La protesta es en defensa de su convenio colectivo porque, según los trabajadores, la firma intenta recortarlo.

Mientras dure la huelga, habrá unos servicios mínimos que incluyen atender los casos de personas encerradas en ascensores y las averías en viviendas en las que haya minusválidos.

Hace más de cuatro meses que los representantes de la plantilla están negociando el convenio, pero no se alcanza un acuerdo. El texto llevaba varios años prorrogados, pero ahora -según los trabajadores- Zardoya Otis pretende rebajar derechos adquiridos. Entre ellos, el de establecer la obligatoriedad de la disponibilidad 24 horas. En la actualidad, esa disposición a trabajar a cualquier horario es voluntaria.

Los trabajadores también se oponen a que haya una doble tabla salarial. De esa forma, los empleados más antiguos tendrían unos sueldos superiores y los de nueva incorporación percibirían unas retribuciones más bajas.

Miembros de la plantilla indicaron a Málaga Hoy que llevan cinco años con el sueldo congelado. Un "esfuerzo" que, afirman, han hecho para ajustarse a la situación de crisis del país. Pero ahora no están dispuestos a perder los derechos ya conseguidos en su convenio. En España, la empresa tiene unos 3.800 empleados y en Málaga, unos 70.