sucesos

Un arsenal de juguete

  • La Guardia Civil publicó una imagen de una pared llena de armas tras una operación contra la mafia rusa en Marbella que son de uso deportivo y no se intervinieron

El arsenal que la Guardia Civil mostró a finales del mes pasado en la operación Oligarkh contra la mafia rusa en la Costa del Sol es de juguete y no fue incautado. Bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella, los agentes detuvieron a 13 personas, entre ellas un capo y el presidente del Marbella C. F., Alexander Grinberg. Se realizaron además 18 registros (ocho en domicilios y diez en empresas) y se requisaron 23 vehículos de alta gama, dinero y joyas.

En uno de los inmuebles registrados los agentes descubrieron una habitación en el sótano repleta de equipamiento militar y que contenía lo que parecía ser un arsenal de armas de guerra que resultó ser la colección privada de réplicas de airsoft (un deporte de estrategia basado en la simulación militar) del hijo de uno de los investigados, la cual fue fotografiada y se publicó como un arsenal de guerra por la Guardia Civil. Aunque en un principio se informó a través de una nota de prensa que se intervinieron diversas armas de fuego, fuentes de la investigación confirmaron a este periódico que ninguno de los fusiles mostrados en la imagen fueron requisados y solo se incautó una pistola no funcional susceptible de ser modificada para que dispare balas.

Esto también fue corroborado por el propio propietario de las réplicas de airsoft, un deporte similar al paintball. Málaga Hoy se desplazó hasta la vivienda del joven de 24 años, estudiante de Derecho e hijo de uno de los investigados.

Este joven es un jugador habitual de airsoft y guarda en una habitación de su casa todo el equipamiento relacionado con su hobby. Así, en una pared de este cuarto tiene ordenados dos fusiles de francotirador, una ametralladora ligera, siete fusiles de asalto, un subfusil y una escopeta, todas réplicas exactas de armas reales, pero que disparan bolitas de plástico de 6 mm. El estudiante afirmó a este periódico que se siente "orgulloso" de su habitación porque el airsoft es su hobby, lo lleva practicando desde 2006 y está federado a nivel regional. De hecho tiene un canal en YouTube en el que habla sobre las novedades de este deporte y analiza réplicas.

Asimismo, relató que cuando los agentes de la Guardia Civil entraron en esta habitación el 26 de septiembre llamaron a la Unidad de Intervención de Armas que registró el lugar a fondo y dio con los papeles de las réplicas, en los que se muestra que están registradas a su nombre en el Ayuntamiento de Marbella, por lo que no había ningún motivo legal para incautarlas, y por tanto no se requisaron. "Lo raro es que sacan una foto y sabiendo perfectamente que no se han llevado nada, que no son pruebas y que no son armas de fuego publican esa foto en la página web y se la ceden a la prensa", explica, y añade que al día siguiente la imagen ya estaba en los periódicos y salió también en los programas de televisión.

El joven critica que con la publicación de la fotografía "es muy difícil asumir la inocencia de alguien si se enseñan armas y dicen que son armas", y añade que "muchos clientes, colaboradores y patrocinadores del equipo de fútbol han reaccionado como cualquier persona normal reaccionaría". Dos días más tarde, el joven subió una foto a su Facebook en la que posaba con sus réplicas y un periódico con la noticia sobre la operación, y se preguntaba irónicamente cómo era posible que las armas que mostraba fueran las mismas que las del arsenal.

De igual forma, el abogado de la familia, José Francisco Ruiz, denunció los hechos a través de un blog jurídico y calificó de "incomprensible" la publicación de la imagen, que no achaca a los "abnegados agentes sino a mandos ansiosos por colocarse medallas que no les corresponden".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios