Educación

Andalucía es la tercera comunidad con mayor absentismo escolar de España

  • El 23% de los alumnos reconocen que faltan a clase sin justificación Cataluña duplica el porcentaje andaluz, mientras que los estudiantes baleares son los de mayor asistencia.

La falta a clase del alumnado sigue siendo uno de los problemas de la educación andaluza. Así lo constata el último informe PISA, que refleja que un 23% de los estudiantes que han participado en dichas pruebas admiten que han dejado de asistir, al menos un día, de forma injustificada al colegio. Este porcentaje sitúa a Andalucía como la tercera comunidad con más absentismo escolar, aunque por debajo de la media española y muy alejada de Cataluña, donde dicho fenómeno alcanza al 48% de los alumnos de 15 años que han sido evaluados. El informe internacional hace hincapié en que la falta de asistencia se produce, sobre todo, en los entornos sociales más desfavorecidos e influye en los resultados académicos.

Este factor no se incluyó en la edición del PISA 2009, pero su incidencia es tal que los expertos han decidido tratarlo con el fin de relacionar el nivel de aprendizaje de los alumnos y la regularidad en la asistencia al aula. Andalucía es la tercera comunidad española donde este fenómeno se encuentra más presente. De los 1.434 estudiantes andaluces que han participado en las pruebas, el 23%, es decir, 330, afirmaron que habían faltado a clase sin justificación. De ellos, el mayor grueso (un 18%), lo hicieron una o dos veces; el 3%, tres o cuatro; y el 2%, cinco o más. Dicho porcentaje coloca a la región andaluza como la tercera con mayor absentismo en los centros educativos, aunque la calificación no resulta tan preocupante si se tienen en cuenta los altos índices que se registran en las comunidades que la preceden.

Así, el País Vasco la supera en siete puntos, al alcanzar el 30% de absentismo escolar, y en Cataluña el porcentaje se dispara hasta el 48%, más del doble que en Andalucía. Estas dos comunidades sobrepasan ampliamente la media española, que es del 28%, una cifra, sin duda, bastante elevada en comparación con la de los 34 países que conforman la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos), encargada de elaborar el PISA, que registra un 15% de absentismo.

El informe incide en la gran variabilidad entre las regiones españolas a la hora de analizar la asistencia del alumno. Así, se diferencia un primer grupo de seis comunidades (Baleares, La Rioja, Aragón, Madrid, Castilla y León y Asturias) en el que el porcentaje de absentismo no supera el 10%. Otro segundo grupo lo conforman Galicia, Navarra, Extremadura y Cantabria. En él dicho fenómeno no sobrepasa el 20%. El último lo constituyen Murcia, Andalucía, País Vasco y Cataluña. En este caso el porcentaje de absentismo va desde el 21% de la comunidad levantina al 48% de Cataluña.

La distribución resulta interesante a la hora de comparar la falta a clase con los resultados logrados por las autonomías en el PISA (en esta edición no han participado Canarias, Valencia ni Castilla-La Mancha). Entre las regiones con mayor absentismo se encuentran Murcia y Andalucía, que se sitúan a la cola del ranking en la aplicación por parte de sus alumnos de los conocimientos matemáticos, de comprensión lectora y ciencias. Sin embargo, el País Vasco y Cataluña logran puestos intermedios en la tabla (los vascos se alzan, incluso, como terceros en competencia matemática). Dentro del primer grupo destacan Madrid y Castilla y León que, además de lograr una asistencia bastante regular de sus escolares, consiguen los mejores datos en lectura y ciencias, respectivamente. La única excepción de las regiones con menos absentismo es la de Baleares, donde sólo un 3% de sus alumnos faltan a clase, lo que no impide que se sitúe al final del ranking en los resultados académicos.

Por tanto, se deduce que si bien la asistencia continuada a clase no garantiza el éxito educativo, un alto índice de absentismo sí se convierte, en la mayoría de los casos, en un obstáculo para no alcanzarlo. El informe de la OCDE añade, además, que las ausencias suponen "una muestra de desinterés del alumno hacia el estudio y repercuten negativamente en sus compañeros, ya que perjudican el clima general de la clase y su ritmo de aprendizaje".

En comparación con el resto de países que han participado en el PISA, Andalucía se encontraría cercana a la situación de Canadá, donde el absentismo afecta al 22% del alumnado, un punto menos que esta región. Los países donde más se falta a clase son Italia, con un 48% de ausencia (al igual que Cataluña) y Turquía, donde dicha cifra se eleva al 55% y del que hay que subrayar que el 13% afirma faltar a clase sin justificación tres o cuatro veces por curso y un 8% cinco días o más. Japón y Corea del Sur son los que menos sufren este fenómeno (sólo registran un 1% de absentismo en sus estudiantes). Estos países asiáticos se colocan también en lo más alto de la tabla por la aplicación de los conocimientos en las tres disciplinas analizadas.

Los expertos que han elaborado el informe no sólo relacionan la falta a clase con los resultados académicos, sino que lo vinculan con el entorno en el que habita el alumno. El PISA concluye que dichas ausencias son más acusadas entre los estudiantes con circunstancias socioeconómicas desfavorables. En ellos el porcentaje de absentismo es del 18%, una cantidad que se reduce seis puntos en el caso de los que cuentan con condiciones más benévolas. En España la diferencia se agranda con un 37% de alumnos absentistas en las zonas con riesgo de exclusión social y un 19% (casi la mitad) en los enclaves más favorecidos.

Otro aspecto relacionado con las faltas es la impuntualidad. En Andalucía el 32% de los alumnos encuestados reconocen llegar tarde a clase, una cifra que se mantiene por debajo de la media española (34%). De ellos, el 24% se retrasó una o dos veces; el 5%, tres o cuatro; y el 3%, cinco veces o más. En este aspecto la comunidad andaluza se mantiene alejada de aquéllas en las que la impuntualidad es más común, como Galicia (donde el 53% de los estudiantes llegan tarde) y el País Vasco el País Vasco (con el 55%).

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