El panorama televisivo ha sido un caballo de batalla en los últimos años para la Liga Endesa. Se ha tenido teórica visibilidad en TVE a cambios de muy mejorables retransmisiones, escasa promoción y casi nulo ingreso. En el seno de la ACB se gestiona un cambio. Ya se habló de ello en la última Asamblea, celebrada el pasado lunes, pero queda pendiente la decisión.

La ACB negocia un acuerdo con Movistar para que la plataforma ofrezca la próxima temporada la Liga Endesa. La fórmula de coexistencia de retransmisiones en abierto y de pago está ahí, también la exclusividad. En función de lo que abone el reformado ente, que aspira a aglutinar los derechos deportivos, podrá tener más exclusividad. Hay que recordar que ya detenta los derechos de la Euroliga. En los clubes hay mucha satisfacción con el producto que se ofrece aunque hay límites en la difusión. La unificación de Imagenio y Digital Plus en Movistar aumenta el potencial mercado.

Movistar pagará, como referencia, a la Liga Asobal de balonmano 700.000 euros anuales durante tres temporadas por la exclusiva de sus competiciones. El propósito es hacer retransmisiones de alta calidad, con variedad de cámaras, previas y postpartidos y entrada en los vestuarios. También se realizarán carruseles con retransmisiones simultáneas y opciones abiertas. El modelo se puede observar ya en los partidos de la Liga Adelante de fútbol.

Durante un tiempo se dudó en el baloncesto español si dar el paso porque se considera que a principios de siglo, con Canal +, se perdió llegada. Ahora, la coyuntura televisiva es otra y el paso está cercano. El inicio sería en la Supercopa de Málaga.