Son malos momentos para Ignacio Camacho, al que las lesiones andan atormentando desde hace ya casi un año. El día que volvía para ser el lugarteniente del centro del campo tuvo que marcharse otra vez a la enfermería. Apenas se habían disputado 25 minutos y la mala fortuna le hizo trizas. Pugnando con un rival del Sporting, la pierna se le quedó enganchada y súbitamente se dio cuenta de que una rotura de fibras le sobrevino. El ex del Atlético de Madrid se enfrenta a varias semanas de baja, puesto que el latigazo que experimentó en la zona de los isquiotibiales fue bastante fuerte.

Habrá que esperar 24 horas más para que pueda ser sometido a pruebas que den un diagnóstico más certero, aunque la primera exploración y las sensaciones del futbolista son bastante malas. De hecho, que ni siquiera pudiera apoyar la pierna cuando se lesionó deja a las claras la gravedad de la dolencia. Podría tratarse de un desgarro de varios centímetros, lo cual podría llevarle a estar un mes o más fuera de los terrenos de juego.

Y no sólo eso, se trata del nuevo parón en seco para un futbolista que tuvo que pasar por el quirófano en verano y no pudo completar una pretemporada normal con sus compañeros. Desde que reapareciera, ya es el segundo revés muscular que sufre. La semana pasada un pinchazo más leve, en el tensor de la fascia lata del pie derecho, le privó de jugar contra el Deportivo de la Coruña. El hecho de sufrir un nuevo revés tiene mucho que ver con no haber disfrutado del mismo trabajo que el resto de compañeros durante el periodo estival.

A falta de que las tests clínicos indiquen cuánto tiempo tendrá que permanecer de baja, en este caso se tendrá mucha más precaución con él, puesto que el futbolista se arriesgaría a sufrir otra rotura de fibras que complique mucho más la temporada para Camacho, que está viviendo la peor campaña de su carrera deportiva.

Igualmente, a Rosales se le vio con algún problema físico al término del choque, aunque el Málaga no informó de ninguna incidencia respecto a su estado.