Brown se va, Herrmann vuelve

Hace poco más de cinco años que el Unicaja tocó la cima con el título de la ACB. Poco a poco, los jugadores de aquel equipo van poniendo fin a sus carreras. Ayer había noticias de dos miembros emblemáticos de aquel equipo, dos jugadores del quinteto titular campeón en Vitoria: Walter Herrmann y Marcus Brown. Cada uno por un motivo diferente. Uno volvía a jugar tras más de un año parado y el otro ponía fin a una longeva carrera.

Herrmann, de 33 años, había jugado su último partido oficial aquel día que el Caja Laboral ganó la ACB con el 2+1 de San Emeterio ante el Barcelona, año y medio atrás. Volvió de manera simbólica, en una liga local de Venado Tuerto, su ciudad natal, donde pasa los días hasta que decide a qué dedicarse. "Cada persona tiene su lugar y el mío es Venado Tuerto. Ahora juego por hacer algo, para divertirme con mis amigos y nada más", dijo en Olé. Anotó 22 puntos y sumó 21 rebotes. Herrmann jugó en Málaga de 2003 a 2006.

Más solemnidad para el adiós de Marcus Brown a los 37 años tras tres temporadas en el Zalgiris Kaunas, en el que incluso llegó a ejercer el papel de entrenador simultáneamente al de jugador. Una leyenda del baloncesto europeo que jugó en Málaga dos temporadas en la que dejó el susodicho título y una presencia en la Final Four como legado. Aunque ya había pasado su cénit, dejó su sello de ganador absoluto y una personalidad arrolladora sobre la pista. Su cima, quizá, aquel quinto partido de la semifinal ante el Joventut en el que sumó 31 puntos. Sublime.

21 títulos repartidos entre siete países (Rusia, Turquía, Francia, Israel, España, Italia y Lituania), siete galardones de MVP. Brown es el máximo anotador de la historia de la Euroliga, que le homenajeará el próximo lunes en el estreno de la competición en Kaunas con el Zalgiris-CSKA. "Quiero decirle a todos los fans de cada país que jugué gracias desde el fondo de mi corazón", dijo en su adiós.