Camacho no da pistas sobre su futuro y alaba a Recio: "Es un jugador top, me ayuda mucho"

El nombre de Ignacio Camacho sigue estando en boca de todos. Se avecina un verano en el que el futuro del centrocampista aragonés volverá a ser el eje de los pensamientos del malaguismo, que no se hace a la idea de perder a su bastión. El propio jugador habló ayer en Canal Sur, sin desvelar ninguna novedad, sobre su posible salida del club. "En el fútbol puede pasar de todo. Siempre se habla de esto pero aquí estoy a gusto. No voy a engañar y decir que voy a estar aquí 10 años porque no lo sé", comentó.

Camacho, al mismo tiempo, colocó en una balanza el ansia de crecimiento como jugador con la felicidad familiar: "La vida del futbolista es muy corta. Uno quiere conseguir la meta más alta que pueda a nivel de títulos porque es ambicioso, pero eso no quiero decir que yo también vea la felicidad de mi familia".

El líder del centro del campo blanquiazul elogió a su compañero de batallas, Recio, al que definió como "un jugador top", el cual "me ayuda mucho en el campo y tiene mucha calidad". Ambos jugadores son inamovibles en los esquemas de Javi Gracia, además de compartir una buena amistad como se pudo ver en el Periscope que alguno de los jugadores realizaron esta semana.

Camacho repasó algunos momentos clave de la presente campaña, deteniéndose en la eliminación ante el Mirandés que supuso un antes y un después para el cuadro blanquiazul. "La imagen no fue buena. Había que ir todos a una y nos reunimos Weligton, Duda, Roque y alguno más y se habló de sacar adelante la situación, de no estar cada uno a su bola. La verdad es que el equipo cambió y empezamos a dar otra imagen", aseguró.

El centrocampista, al que no le desmotiva "luchar por la permanencia", indicó que "es más difícil de llevar esa presión que lograr un objetivo en Europa". Por otro lado, echó la vista atrás y repasó los malos momentos en su etapa como malaguista: "El primer año llegué en diciembre y jugué cuatro partidos, fui seis a la grada y acabé jugando. Llegué a llamar a mi representante a las 4 de la mañana para decirle que no podía más". Por último, Camacho desmintió un posible viaje a Liverpool asegurando que "estaba en Marbella cenando con mis amigos" y dio importancia al octavo puesto del equipo: "Es bueno para el club y supondría dar una alegría a la afición".