En la entrada, antes de que suenen los himnos nacionales, y la celebración ganadora de cada equipo en la Copa Davis en Málaga suena una canción elegida por el país en cuestión. Por ejemplo, Italia hace sonar un clásico eterno desde hace décadas, Ma il cielo è sempre più blu. En el caso de Serbia, en la entrada de Djokovic y sus compañeros y en la celebración tras derrotar a Gran Bretaña sonaba Veseli se srpski rode. Una canción patriótica cuyo uso generó bastante polémica a través de las redes sociales.

En la canción hay referencias a héroes medievales y figuras históricas religiosas del país y también a Kosovo, territorio que pertenecía a Serbia que desde 2008 es independiente, aunque no es reconocido por numerosos países, entre ellos España. De hecho, cuando la selección de fútbol se enfrentó hace pocos años, desde el Gobierno se dio la orden de referirse al rival como la Federación de Kosovo. 

Es un tema delicado y recurrente. En Serbia se reclama como propio, de hecho allí se sitúa la cuna de la nación, de ahí las reivindicaciones constantes que siguen existiendo desde Belgrado. Ahora la mayoría de la población del territorio kosovar es de origen albanés.