Jannik Sinner, héroe de Italia, que derrotó por partida doble a Novak Djokovic en semifinales de la Copa Davis, calificó su actuación en Málaga como uno de los partidos más importantes de su vida y reconoció que jugar una final por la ensaladera de plata “significa mucho” para ellos.

“No sé si ha sido el partido de mi vida, pero seguramente uno de los más importantes. He puesto tanta energía como mis compañeros y nuestra gente del público”, dijo Sinner tras certificar el pase a la final gracias al triunfo sobre Serbia en el dobles, junto a Lorenzo Sonego (6-3 y 6-4). “Disfruté jugando hoy. Fue un gran partido de individuales, donde empecé muy bien. Obviamente en el segundo set Djokovic subió su nivel y en el tercero simplemente intenté aguantar mis juegos de saque y esperé una buena oportunidad que me llegó con el 5-5 y la aproveché”, analizó el italiano.

El momento épico de la eliminatoria, que acabó en remontada italiana por 2-1, fue en el tercer set del partido contra ‘Nole’, cuando el serbio lo tenía todo para ganar (2-6, 6-2, 5-4 y 0-40 en el último set); tres bolas de partido que desperdició gracias al resurgir de Sinner. El italiano se refirió a ese momento clave en rueda de prensa: “Iba 0-40 y él falló un revés bastante fácil, eso me dio un poco de confianza. Luego saqué dos veces muy bien. Después de ese tipo de juegos, tu nivel de energía y tu nivel mental aumentan y pude vencer”, reconoció.

“Creo que planteamos una buena táctica de partido. Obviamente jugarlo es diferente, pero pienso que debo estar muy orgulloso de cómo he manejado la situación”, añadió el número cuatro del mundo, que ha ganado a Djokovic tres veces en los últimos doce días si se suman los cuatro enfrentamientos que tuvieron entre Copa Davis y Finales ATP. “Mañana tenemos una gran oportunidad, pero tenemos que estar felices de haber llegado hasta aquí. Significa mucho para nosotros”, dijo en referencia a la final de este domingo que jugarán ante la Australia de Álex de Miñaur (16.00 horas).

“Somos un grupo joven con una presión privilegiada, estamos en una final de Copa Davis”, terminó Jannik, el artífice de que su país vuelva a jugar una final de la Copa Davis 25 años después de la última vez.