Empate válido y muy peligroso

La primera eliminatoria de la fase de ascenso llegará al campo de la Federación con todo por decidir. Bueno, porque los malaguistas tendrán en su mano el pase a la segunda ronda con un simple triunfo en su campo, algo que han logrado en casi todos los partidos que han disputado este curso. Y malo porque se llegará a ese encuentro de vuelta con un 0-0 que implicará no cometer errores, pues un gol visitante pondría las cosas muy complicadas para el equipo de Manel Ruano, que tendrá toda la presión el próximo fin de semana.

El partido en sí tuvo poca historia. Mucho respeto entre ambos equipos. Uno no quería encajar en casa y el otro no quería que la eliminatoria se le escapara demasiado en el primer envite. Al Malagueño, que llegaba con el claro objetivo de marcar, se le quedó en el tintero el gol. Jaime Moreno, Ontiveros y Kuki conformaban el ataque del cuadro blanquiazul, pero esta vez la pólvora se había quedado en casa.

Las ocasiones brillaron por su ausencia, tanto en un área como en la otra. Los locales gozaron de varios arreones empujados por el casi millar de espectadores que se dieron cita en el Municipal de Villafranca, pero poco más.

El paso de los minutos fue incrementando el temor a que un gol complicara en exceso la eliminatoria a ambos conjuntos.

Y así hasta el final de los 90 minutos. El exceso de centrocampismo, los constantes parones y la falta de fluidez impidieron ver un mayor espectáculo en tierras catalanas.

Ahora, los de Ruano tendrán que asumir la responsabilidad en el campo de la Federación y liquidar una eliminatoria que llega en igualdad de condiciones a la vuelta. Bastará con ganar en casa. No parece mal plan a primera vista. Seguro que habrá buen ambiente.