Cuando Carlos Jiménez fue fichado por el Unicaja allá en 2006, Sergio Scariolo le alineó durante toda su primera temporada como cuatro. La decisión del italiano generó no pocos debates. En su siguiente temporada, Jiménez jugó alguna vez como alero, pero ya alternaría con bastante frecuencia las dos posiciones. Así jugó el último año con el Estudiantes. Con el tiempo se va perdiendo velocidad, la tendencia es a jugar más cerca del aro. La vía que abrió Scariolo ha sido explorada por más entrenadores, el último Jasmin Repesa. Jiménez cumplirá 37 años en febrero y está en los últimos coletazos de su carrera. ¿Serán en diciembre o en junio?

Es la pregunta que Jiménez deberá contestar. Su tercer mes de contrato acaba a mediados de este mes. Él se comprometió a seguir hasta que Vidal estuviera a buen nivel. Visto cómo jugó el catalán ante el Murcia, está ya para aportar. Repesa, ya lo ha dicho más de una vez, está encantado con Jiménez, con su actitud, trabajo y aportación al vestuario. Y cada vez le emplea más en la posición de ala-pívot, como cuatro. Lo que implica un sexto jugador interior y un diferente reparto de minutos. Habría seis exteriores para tres puestos y otros seis para dos en el interior. Jiménez jugó como cuatro ante el Murcia, defendiendo a David Barlow. El australiano pasó desapercibido por el Carpena. Pero ya era un fenómeno repetido en encuentros anteriores, emplear a Jiménez para defender a interiores abiertos. Repesa considera que es un especialista de alto calibre en ese aspecto y que sus características no las tiene en otro de los cinco pivots.

Perovic, por ejemplo, no jugó un solo minuto ante el equipo murciano. Explicó Repesa que la lesión de Marcus Lewis le sacó de sus planes. Pareció duro que el serbio no jugara un minuto en un encuentro prácticamente decidido desde el inicio de la segunda mitad. Pero con esa incoporación de Jiménez a la rotación interior los minutos se reducen. Antes, en Siena, fue el antiguo capitán de la selección española el que se quedó sin jugar. La competencia se eleva y el arsenal táctico para Repesa se extiende.

Falta saber ahora si Jiménez aceptará ese esfuerzo extra. Es el único dentro del club que no quiere seguir, aunque desde todas las partes del club se le intenta seducir para que continúe. Repesa, de esta forma, tendría un pívot más que también podría jugar de alero.