Lo que debía ser un día muy feliz para Edu Ramos, su clasificación con la selección sub 17 para las semifinales del Mundial de Nigeria, se convirtió en una pesadilla para el malagueño, que a pocos instantes del final sufrió un golpe fortuito en la rodilla izquierda que le obligó a retirarse en camilla. El de Churriana lo hizo llorando y quejándose amargamente de un fuerte dolor. A falta de una exploración concluyente, podría tener afectados los ligamentos.

El lance, justo apenas unos segundos antes de que Uruguay lograra el 3-3 que llevó a la prórroga, no pareció al principio más que un fuerte golpe de rodilla con rodilla, pero los evidentes gestos de dolor del malagueño hicieron temer lo peor. Varios miembros del club estaban viendo el partido por televisión y se echaron las manos a la cabeza al ver cómo se retiraba del campo la joven promesa.

Hoy se espera que los servicios médicos de la selección evalúen con mayor exactitud el alcance exacto de su lesión, tras lo cual se tendrá que decidir si el futbolista regresa a Málaga inmediatamente o se queda para asistir a la suerte del conjunto de Ginés Meléndez en la competición.

Edu Ramos había saltado al terreno de juego en el minuto 61 por Muniain, con 3-1 a favor en el marcador, y tuvo que ser reemplazado por Kamal en el 90.

España logró su pase a las semifinales tras derrotar en la tanda de penaltis al cuadro charro, que se adelantó en el marcador pronto gracias a Luna y luego vio cómo Isco, de penalti, y Borja, éste dos veces, daban la vuelta al resultado. Tras una prórroga abierta, en los penaltis la sub 17 se impuso por 4-2. Ahora espera Nigeria.